AMLO es el más beneficiado con conflicto en Va por México, dicen politólogos

De acuerdo con politólogos, desde hace varios meses el presidente de la República ha buscado dividir a la oposición para lo que apuntó al que ve como el rival más débil de esa alianza: el Revolucionario Institucional.

“Hay contextos en los que la oposición es muy vulnerable para ser dividida y éste fue el caso. La oposición es terriblemente vulnerable”, asegura Aldo Muñoz Armenta, académico de la Universidad Autónoma del Estado de México (UAEM).

A ese partido el presidente le ha lanzado “coqueteos” para que apoye su proyecto de transformación y le ha sugerido en varias ocasiones repensar su alianza con Acción Nacional y retomar los principios que enarbolaron sus fundadores. El martes, en su conferencia de prensa, el presidente afirmó que esa fuerza política puede “divorciarse” de sus aliados electorales, sobre todo si no le está yendo bien.

Deslindarse del conservadurismo de Acción Nacional, a reivindicarse y aprovechar la oportunidad, a retomar los principios de defensa de la nación como como lo hicieron los expresidentes Lázaro Cárdenas y Adolfo López Mateos, han sido solo algunos de los llamados que ha lanzado el presidente López Obrador a los miembros del Revolucionario Institucional.

“El presidente ha insistido al PRI en reconsiderar su alianza con el PAN, el presidente López Obrador quiere dividirlos, quiere que dejen de ser adversarios, sobre todo el PAN, que se extingan, que se conviertan en un grupo de presión, o en otra cosa, pero no en partidos porque hasta ahora lo que están demostrando esos partidos es que con todo y sus debilidades el PAN es el único partido que puede aglutinar a la oposición a mediano y largo plazo en México”, agrega Ruiz Vargas.

Pero dividir a la posición no es privativo del presidente López Obrador, pues cualquier gobierno intenta hacerlo cuando las condiciones políticas no le son favorables.

“Seas de izquierda, de derecha, seas nacionalista o partidario de la privatización tu misión política es cooptar a la oposición o dividirla, eso forma parte del manual de ciencia política para quienes gobiernan”, señala Muñoz Armenta.

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Al presidente Andrés Manuel López Obrador no le preocupaba la oposición y mucho menos estaba enfocado en dividirla en la que fue su primera mitad de gobierno porque Morena y sus aliados tenían los votos suficientes para aprobar cualquier cambio constitucional, sin embargo tras las elecciones de 2018, eso cambió.

“Al presidente no le interesaba dividir a la oposición antes porque tenía todos los votos tanto de la Cámara de Diputados y en el Senado con poco trabajo político sin problema se aprobaban sus iniciativas, pero ahora ya no se puede. El presidente no tiene de otra tampoco su partido, que no sea dividir”, destaca el académico.

Tras las elecciones del 2018, Morena y sus aliados se quedaron con mayoría simple pero perdieron la calificada: 277 legisladores que representan el 55.4%, con lo que están en posibilidades de aprobar iniciativas sin necesidad de otras fuerzas políticas.

Los politólogos consultados consideran que al presidente le interesan los votos del Revolucionario Institucional.

“López Obrador quiere traerse al PRI a las filas de Morena, que el PRI renazca en Morena, ese es un poco el proyecto, pero hay un PRI que se resiste”, dice Ruiz Vargas.

Fue justo una iniciativa de una diputada federal del PRI la que propició tensión en la alianza: la que propone ampliar de cinco a nueve años la presencia de los militares en tareas de seguridad y que fue propuesta por la priista Yolanda de la Torre.

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Prolongar la presencia de militares en tareas de seguridad es una de los propósitos del presidente López Obrador, para lo cual ha asegurado que lo ideal sería realizar una reforma constitucional, pero no cuenta de los votos necesarios para hacerlo.

"¡Hay que prolongar más el mandato!, lo que establece el transitorio. Una reforma constitucional, eso es lo ideal, pero tenemos nosotros que buscarle la forma porque nos están bloqueando en vez de ayudar, hay la intención de que no podamos hacer nada y no les importa pues que se trate de asuntos que tienen que ver con la seguridad”, dijo este viernes.

Una oposición unida ya dio muestras de que puede frenar al presidente de la República, como sucedió con el rechazo que hicieron a la iniciativa de reforma eléctrica en abril de este año.