Un botón de muestra
El pasado 15 de julio, el embajador Ken Salazar felicitó al gobierno de México por la captura del líder del desaparecido Cártel de Guadalajara, Rafael Caro Quintero.
“La justicia siempre llega. Felicidades a nuestros socios mexicanos por la captura de Rafael Caro Quintero quien por años aterrorizó a ciudadanos mx y estuvo implicado en secuestro, tortura y asesinato de agente de @DEAHQKiki Camarena. #SeguridadCompartida”, dijo.
Y citó: "Para aclarar, ningún personal de los Estados Unidos participó en la operación táctica que resultó en el arresto de Caro Quintero: la aprehensión de Caro Quintero fue realizada exclusivamente por el gobierno mexicano".
Sus declaraciones contrastaron con las de la jefa de la agencia antidrogas estadounidense, Anne Milgram, quien confirmó la participación de la DEA en dicha captura.
"Nuestro increíble equipo de la DEA en México trabajó en conjunto con las autoridades mexicanas para capturar y arrestar a Rafael Caro Quintero, quien está acusado en EU de torturar y asesinar al agente especial de la DEA "Kiki" Camarena", reconoció.
Antes de que el embajador Ken Salazar se viera envuelto en esos señalamientos, el 5 de julio The New York Times, reveló “cierta desconfianza” de funcionarios estadounidenses hacia el diplomático.
“Al interior del gobierno hay una preocupación creciente de que, en el proceso de acercamiento, el embajador haya arriesgado los intereses estadounidenses y no haya usado la relación para avanzar las políticas cuando Biden más lo necesita, según entrevistas con más de una decena de funcionarios y exfuncionarios y analistas”, se lee en el artículo.
Ello le valió que el Ejecutivo mexicano saliera en su defensa:
“El embajador Ken Salazar es un hombre responsable que defiende a su país. Estuvo conmigo casi una semana aquí recibiendo a 18 dueños de empresas estadounidenses, tratando caso por caso, y es una gente de lo mejor, pero los del NYT están con la idea de que Estados Unidos debe someternos, creen que somos colonia. No, México es un país independiente, soberano, no se subordina a ninguna potencia, a ninguna hegemonía, a ningún gobierno del mundo”.
Lo cierto es que a Salazar se le ve prácticamente cada semana en Palacio Nacional para abordar temas relacionados con la iniciativa de reforma eléctrica, la Cumbre de las Américas, el encuentro con Biden y ahora el panel de controversia en el marco del T-MEC.