La historia de Melvin en el mismo tráiler
La última vez que Melvin se conectó con su madre, en Guatemala, fue para decirle que ya estaba "del otro lado", en Texas, Estados Unidos, donde horas después moriría dentro de un remolque junto con otros migrantes.
En Houston, su destino final, lo esperaba su padre, Casimiro, quien trabaja allá desde hace un año. La familia en su aldea natal Tzucubal, en el municipio de Nahualá, unos 160 kilómetros al oeste de la capital guatemalteca, aguardaba la confirmación del arribo exitoso de este adolescente indígena de 13 años.
Por lo que (pasaban) las noticias, por los horarios, (estábamos) seguros que iban allí en el tráiler".
Yolanda Olivares, madre de Jair y Jhovani.
Pero la llamada que entró fue la de las autoridades para confirmar lo que ya presumían: que su familiar estaba entre los migrantes hallados muertos dentro del contenedor de un camión abandonado en San Antonio, Texas.
Especialistas estiman que dentro de ese remolque la temperatura pudo alcanzar los 65ºC, en esta zona donde el sol golpea con furia. Hasta el momento se han contado 53 fallecidos. Según las autoridades de Guatemala, ocho de ellos eran de ese país.
"En el caso de nuestro familiar, nos enteramos [que había llegado a Estados Unidos] a través de un mensaje que él mandó con su mamá el lunes por la mañana. Luego el martes [supimos de la tragedia] por las redes sociales", dijo María Guachiac, prima de Melvin. La familia no sabe cómo terminó dentro del camión.