Mastografías bajaron 50% en pandemia
El ensayo del INSP resalta que uno de los sectores más afectados por la pandemia de covid-19, tanto por el confinamiento como por la reconversión hospitalaria, fueron aquellos servicios de salud considerados "no esenciales", entre ellos los programas públicos de detección de cáncer de mama.
Lo anterior derivó en que, a partir de que se declaró la emergencia sanitaria en México, el número de mastografías de detección en México sufrió una caída general del 50%, la cual se prolongó al menos seis meses.
En todo 2020, año de la declaratoria, en México se realizaron solo 65 mastografías de detección, mientras que en enero de 2021 se lograron 200.
"Al inicio, la justificación fue que un retraso de tres meses en la detección de cáncer de mama no incrementaría significativamente la mortalidad porque 80% de los cánceres que se detectan en tamizaje son de 'lento crecimiento'", refiere el ensayo.
Pero los meses trascurrieron y, a dos años del inicio de la pandemia, se han anunciado caídas pronunciadas en los procedimientos de detección del cáncer de mama a nivel mundial, lo que indiscutiblemente aumentará la carga futura de esta enfermedad.
El estudio resalta que, aunque todavía es pronto para estimar el impacto que pudo haber tenido este abandono a la detección de cáncer de mama en nuestro país, los datos internacionales indican que cuando la capacidad del tamizaje se desploma 75% durante seis meses consecutivos, el resultado esperado son 5,000 muertes adicionales en los próximos 10 años.