Las expulsiones de los migrantes originarios de Cuba y Nicaragua se dan bajo el Título 42, una orden de salud pública para contener la pandemia de Covid-19 que confeccionó el gobierno de Donald Trump pero que se mantuvo con la administración de Joe Biden.
El próximo 23 de mayo, el Título 42, que sirvió para deportar en cuestión de minutos a un migrante cuando antes de la pandemia este proceso tardaba entre uno o dos días, quedará suspendido, según lo anunció el secretario de Seguridad de Estados Unidos, Alejandro N. Mayorkas, en abril pasado.
El acuerdo entre México y Estados Unidos para recibir a los migrantes originarios de Cuba y Nicaragua estaría vigente hasta el 22 de mayo, un día antes de que se suspenda el Título 42.
De acuerdo con la agencia The Associated Press, un funcionario mexicano de alto nivel informó que la decisión se tomó ante la masiva llegada de migrantes cubanos y nicaragüenses a la frontera entre México y Estados Unidos.
En México, los originarios de Cuba son el segundo grupo de migrantes que más solicitudes de asilo han presentado en los primeros cuatro meses de 2022.
Cifras de la Comisión Mexicana de Ayuda a Refugiados (Comar) revelan que de las 40,026 peticiones de asilo, 8,445 (20%) son de migrantes cubanos.
También los nicaragüenses están en el top ten de nacionalidades que más solicitudes de asilo han presentado ante la Comar. Se encuentran en el sitio número siete con 2,343 (5.8%).