La escena se dio en la celebración del Día de la Niña y el Niño en la sede del Senado de la República, que por vez primera en sus 200 años de existencia abrió sus puertas a miles de infantes, quienes recibieron la invitación del exgobernador de Zacatecas, de decir lo que piensan de su país y cómo quieren que sea.
“Lo que ustedes piensen del México que quieren, cómo quieren a su país, escriban lo que quieren y luego lo depositan en esa urna (transparente). Esta es la sala principal del Senado, aquí trabajamos, aquí discutimos, aquí trabajamos por México”, aseguró sin dejar de sonreír.
Los pequeñines, ni tarde ni perezosos, le tomaron la palabra e iniciaron el rosario de demandas: "¡que no haya más violencia contra las niñas y los niños! ¡que ya no roben! ¡que dejen de contaminar! ¡que no haya corrupción! ¡que no haya racismo! ¡que no haya delincuencia!". Otros más, pidieron "¡que haya muchos árboles, nubes y perritos!"
Una niña, de 12 años no quiso desaprovechar el micrófono y le envió un mensaje al presidente Andrés Manuel López Obrador: "¡Que ponga más vacunas COVID a los niños! ¡quiero que México sea un país seguro y limpio y quiero que construyan más áreas para niños!", entonó al estilo de los políticos que trabajan en ese recinto.
Asombrada, una señora soltó: "¡Pues en qué país viven estos niños!".
Tras las demandas de los infantes, Ricardo Monreal comentó que esta generación trae otro “chip”. “Me percaté que hablaron de la violencia, de la contaminación, de la corrupción y de querer un México mejor. Me sorprendió mucho porque son niños de cinco o seis años ya con un pensamiento muy claro de lo que quieren de su país”, dijo.