“La captura del líder del cártel redujo los salarios en un 5.3% en los municipios con presencia de cárteles, lo que se explica en parte por un cambio de trabajo remunerado a no remunerado”, explica el estudio.
El análisis, que se enfoca a finales del sexenio de Vicente Fox y en cinco de los seis años del gobierno de Felipe Calderón, aborda cómo la política de México de capturar a líderes de organizaciones criminales impactó en el mercado laboral. En esos cinco años, sostiene, la intención era que con arrestos focalizados se alterara la organización jerárquica del cártel y se disminuyera su capacidad operativa.
De los 2,454 municipios, 2,084 no tienen presencia de ningún cártel, 208 uno, 89 dos, 55 tres, y solo 18 tienen cuatro.
La caída en salarios, de acuerdo con el estudio, se da un año después y de forma gradual tras la captura de líderes de los cárteles y se atribuye a un incremento en el número de personas que se dedican a actividades en el hogar que no son remuneradas, así como al trabajo informal.
“Adicionalmente, aumenta la dificultad de encontrar un puesto de trabajo afiliado al IMSS: el número de trabajadores en este tipo de puestos de trabajo disminuye y aquellos que se cambian de trabajo terminan, en promedio, con un salario más bajo”, sostiene el estudio.