“Celebro que la declaración en el punto 25 se mencione que a partir de cuándo mucho 2023 se van a poder contar con esos fondos, que bueno que así sea y reiterar la importancia de esta decisión, de que se traduzca en un ejercicio de justicia, de un compromiso proporcional de los países”, expuso.
El canciller refrendó que México hará su parte con recursos, pero también en medidas para cumplir con sus metas de acción climática, para reducir las emisiones de metano y presumió “tenemos el programa de reforestación más grande del continente, ahora están trabajando en esa reforestación 400 mil personas”, eso como referencia al programa Sembrando Vida que se aplica en 20 estados del país.
Pero pidió dejar claro que los países en una situación más difícil deben contar con una mano solidaria del G-20 para poder cumplir sus propias metas de acción climática, pues el cumplimiento de éstas enfrentan una situación más complicada por la crisis económica derivada de la pandemia.
“De otra manera estamos haciendo llamados que serán muy difícil cumplir y que también sería injusto para países, el grueso de los países del mundo”, que no tienen recursos, explicó.
“Tenemos que ser justos y el esfuerzo tiene que ser proporcional, país por país, eso significa que si se han mencionado 100 mil millones de dólares que debían haberse aplicado en el 2020 o a partir de 2020 y hasta 2025 estamos en un momento crítico para que efectivamente se implementen y sea claro cómo se van a aplicar”.
Esos recursos, subrayó, deberán ser recursos públicos porque los países que los necesitan no tienen capacidad de endeudamiento.
Además en Twitter Ebrard expuso “tuve el honor de participar en la plenaria del G20 para insistir en el cumplimiento del compromiso de los países ricos de aportar 100 mil millones de dólares a los países en desarrollo para su acción climática. Hasta ahora no ha ocurrido”.
