Murck dijo que para una identificación masiva de personas, México "adolece de una base de datos centralizada de genética y de mecanismos para el intercambio automático de huellas dactilares de personas fallecidas con registros oficiales" que guarden esta información de la población.
Entre ellas, credenciales, identificaciones, licencias de conducir, cartas de antecedentes no penales e información biométrica de los bancos comerciales.
"Necesitamos un consenso técnico con claras responsabilidades e intercambio de información entre fiscalías, servicios periciales y comisiones de búsqueda", apuntó.
El simposio, que se llevará a cabo del 11 al 15 de octubre, contará con la ponencia presencial y virtual de académicos y especialistas de Alemania, Argentina, Austria, Guatemala y México.
México vive una grave tragedia de desaparecidos con más de 90.000 casos desde 1964, año en el que comenzaron los registros.
A inicios de julio, el gobierno mexicano señaló que entre el 1 de diciembre de 2018 -cuando tomó posesión el presidente Andrés Manuel López Obrador- y el 30 de junio de 2021, se reportaron 49.581 desaparecidos, de ellos 28.035 personas fueron localizadas y 21.546, no han sido encontradas.