Oposición acusa a Fuerzas Armadas de ser “edecanes” de criminales

El PRI, con la senadora Claudia Anaya Mota los exculpó, pues la orden presidencial, es “no meterse” con los grupos criminales. Y lo cumplen para no tener que vivir después “el ridículo de soltarlos" como ocurrió con el hijo de Joaquín el "Chapo" Guzmán: "Saludos, Ovidio. Abrazos", ironizó.

Y frente a eso, Morena y la secretaria de Seguridad y Protección Ciudadana, Rosa Icela Rodríguez, insistieron en la estrategia de no ir a la guerra con los grupos criminales.

“Sí es bueno aspirar a que haya más abrazos y menos balazos, pero es un trabajo de todos”, dijo la funcionaria.

“La paz sí se construye con más civilidad, hermandad y, como lo he dicho, no venimos a ganar una guerra, venimos a ganar la paz”, insistió Rodríguez, quien ofreció datos según los cuales ya se redujo la incidencia delictiva en al menos nueve ilícitos, de enero a agosto de este año.

“Secuestro bajó 46.6%; robo de vehículo automotor menor en 40.6 %; robo de ganado se redujo en 37%; robo en transporte público colectivo disminuyó 37.3 %; robo a transportista menos 32.7 %; robo a casa habitación se redujo en 28.5%; robo a transeúnte disminuyó 26.3%, a negocio tuvo una caída de 23.3 % y de hidrocarburos bajó 94 por ciento desde diciembre de 2018”, presumió.

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La pacificación avanza, dijo, y sus datos no fueron rebatidos. Estas son “cifras que los dejaron callados” respaldó la senadora de Morena, Malú Micher.

Lo cierto es que no hubo cifras con qué contrastar. El Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP) omitió publicar hoy, como lo hace los días 20-21 de cada mes, la estadística de incidencia delictiva mensual, con datos duros del fuero federal y fuero común para dar seguimiento a la información oficial, pues es la única fuente que reúne ese tipo de datos oficiales.

Fuerzas castrenses al banquillo

La comparecencia de este martes 21 de septiembre era la de la titular de Seguridad para analizar el tercer informe de gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador en esa materia, pero acudieron como invitados todos los integrantes del gabinete de seguridad.

Sentados en el pleno, escucharon las posturas de los grupos parlamentarios pero sin poder responder, el secretario de la Defensa Nacional (Sedena), Luis Cresencio Sandoval; el de Marina, José Rafael Ojeda; el comandante de la Guardia Nacional, Luis Rodríguez Bucio; el de Gobernación, Adán Augusto López (aunque brevemente), y además el titular de la Unidad de Inteligencia Financiera (UIF), Santiago Nieto, y el subsecretario de Seguridad, Ricardo Mejía Berdeja.

En los hechos fueron las instituciones militares las sometidas a balance, por la instrucción presidencial de “abrazos no balazos”.

Frente al crimen organizado, se dijo, “la Guardia Nacional es el grupo de edecanes más caro que ha tenido este país. ¿No les da vergüenza, señores? los invito a que porten ese uniforme no sólo con gallardía sino con lealtad a la patria; las prendas y las estrellas no significan nada si quien las viste no tiene carácter para defender a los mexicanos”, les espetó de frente la panista Lilly Téllez.

“Abrazos no balazos, es la cínica confesión de que la 4T entregó la plaza a cambio de quedarse con el poder político, tanta era su ambición que doblaron las manos ante el crimen organizado”, agregó al reclamo.

Pero tanto la senadora Eunice Romo de Encuentro Social (PES), como la morenista Micher acusaron a Téllez de protagonizar un “show”.

“La burra hablando de orejas… aquí se habla de traición y resulta que traicionaron a un pueblo”, criticó la última a la panista, por haber renunciado a Morena.

También a manera de disculpas, después en PAN envió a Josefina Vázquez Mota, exsecretaria de Desarrollo Social, a pedir combate a los crímenes que afectan a niños y adolescentes de forma particular, pero de paso mencionar que siendo funcionaria pudo "ver el compromiso, el servicio, y el patriotismo de las Fuerzas Armadas”.

El problema de la política de abrazos, no balazos, situó la priísta Claudia Anaya Mota, es que los cárteles no tienen una guerra entre ellos, sino con todos. “Aunque no te metas, te toca”, recluta jóvenes y “secuestra parejo” a carniceros, ferreteros, empresarios.

“Y la autoridad, para ser sinceros, la Guardia Nacional se voltea cuando van pasando las camionetas adaptadas con torretas y cargadas de hombres armados: 'Pase usted, don caballero'. La instrucción de arriba es no meterse. Yo no sé si la Marina o el Ejército se quieran volver a exponer a detenerlos para después vivir el ridículo de soltarlos. Saludos, Ovidio. Abrazos”.

“La Guardia Nacional omisa, ausente, permisiva, es la verdad, sabemos que es la verdad”, sentenció la zacatecana, quien dijo que en su estado el 40% de los alcaldes han sido visitados por algún cártel, a todos los presiona el crimen y a los ciudadanos sin distingo “nos están matando”.

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Antes de eso, la secretaria Rodríguez había asegurado que en Zacatecas hay una lucha por el control entre los cárteles de Sinaloa y Jalisco Nueva Generación y “en la mayoría de los casos este tipo de violencia va dirigida a personas que generan un vínculo con un grupo de la delincuencia organizada”.

Como el PAN y el PRI, Movimiento Ciudadano y el Partido de la Revolución Democrática (PRD) también pidieron rectificar.

“No se trata de rimar abrazos con balazos, sino de tener estrategia… estamos embarrados cada uno de los que estamos aquí porque además cada uno de nosotros podemos ser víctimas” dijo la emecista Indira Kempis.

Por el PRD, Miguel Ángel Mancera pidió por tanto a la secretaria el plan y las fechas para, como hoy ordena la Constitución, que la Guardia Nacional sea un ente civil y las fuerzas armadas regresen a sus cuarteles.

La funcionaria omitió responder. En cambio dijo que el Plan de Consolidación de la Guardia Nacional se busca preservar el orden y la paz social y con los recursos de 2022 se equipará al personal operativo e invertirá en tecnologías de la información e infraestructura.