¿Qué originó la aprehensión de quien fue gobernador de Puebla de 2005 a 2011? ¿Qué ha pasado desde que dejó el cargo? ¿Quiénes más están implicados con él en las violaciones a los derechos humanos de Cacho? Aquí damos las claves.
El origen del caso
Todo empezó en diciembre de 2005, cuando Marín apenas llevaba 10 meses en el poder y pidió a la jueza Rosa Celia Pérez González —quien sigue en el Poder Judicial— librar una orden de aprehensión contra Cacho, por el supuesto delito de difamación y calumnia en agravio del empresario mezclillero de origen libanés Kamel Nacif, amigo del entonces gobernador.
Nacif había sido mencionado en el libro de Cacho Los demonios del edén, en el que la periodista documenta un red de pederastia y describe fiestas organizadas por él en las que se cometía abuso de menores de edad, en contubernio con otros políticos, empresarios y extranjeros.
La detención y la tortura
El 15 de diciembre de ese año, Cacho fue detenida en Cancún y trasladada vía terrestre por agentes comandados por Adolfo Karam Beltrán, entonces director de la Policía Judicial de Puebla.
Durante el trayecto, según lo denunciado por la propia periodista, fue torturada y amenazada con ser violada y asesinada. Ella quedó libre tras pagar una fianza de 106,000 pesos, pero el proceso legal en su contra duró más de un año.
La @FGRMexico me avisó en cuanto detuvieron al ex gobernador #MarioMarin escondido en Acapulco. Llevo 14 años buscando justicia por haber sido torturada por este cómplice de redes de #PornografíaInfantil Vamos por todos. 🙏🏼 pic.twitter.com/LJX0qXZY8v
— Lydia Cacho (@lydiacachosi) February 4, 2021