"Aguantamos más"
Las jóvenes doctoras se auxilian una a la otra para colocarse el incómodo traje de seguridad: un mono blanco, una bata azul, botas, gorro, gafas y mascarilla.
Grecia recién se graduó en febrero, sin imaginar que el virus golpearía tan duramente a México, que registra 64,414 muertes y casi 600,000 casos confirmados hasta este martes.
Es el cuarto país con más defunciones totales después de Estados Unidos, Brasil e India, aunque su tasa de mortalidad es la decimosegunda en el mundo.
"Al principio la incertidumbre sí te deja pensando, te preocupa, pero si sigues las medidas de protección realmente es un trabajo bastante seguro", comenta.
Al inicio de la pandemia, especialmente, personal médico denunció la escasez de materiales de protección en algunos hospitales públicos. Pero Otto Tavera, de 26 años y quien se desempeña en el área de urgencias, asegura que en este cuenta con el equipo necesario.
"Hay presión laboral y depresión emocional (...), pero somos jóvenes, podemos aguantar más el estrés y la presión propia de tener un traje de plástico ocho o diez horas", afirma Tavera, quien atiende a pacientes críticos que pueden requerir desde oxígeno hasta ser intubados.