"México está muy atrasado en supervisión portuaria (...) pero la 'militarización' y vigilancia sin una estrategia de inspección entorpecería y encarecería mucho el comercio. Los aduaneros y militares deben recibir capacitación, por ejemplo, para distinguir mercancías", expuso el académico Raúl Benítez.
También señaló que, de acuerdo con la Oficina de Naciones Unidas contra la Droga y el Delito (UNODC, por sus siglas en inglés), México no cumple con los requisitos del programa de control de contenedores en cuanto a seguridad, y uno de los factores es su tecnología.
Cuando la incorporación de las Fuerzas Armadas fue anunciada, el gobierno indicó que las aduanas son clave para la reactivación económica (pues representan un ingreso anual de 900,000 millones de pesos) y el combate al crimen organizado y a los "delincuentes de cuello blanco".
En este sentido, Benítez mencionó que el tema de las aduanas es distinto a las administraciones de los puertos, pues los militares llegarían por primera vez a resguardar instalaciones, funcionarios y vigilar que no se cometan actos de corrupción.
"(Además), las aduanas de la frontera México-Estados Unidos están como coladera, donde por debajo se pasan la droga y por arriba las armas", refirió.