Las acusaciones de la FGR
De acuerdo con la FGR, Lozoya participó en los delitos que se le acusan en agravio del Estado mexicano y recibió 10.5 millones de dólares de Odebrecht como sobornos.
Con los pagos ilegales compró una casa en Ixtapa Zihuatanejo, Guerrero, a través de cuentas a nombre de su hermana, su madre y su esposa, la cual no fue informada debidamente ante la Secretaría de la Función Pública (SFP), según la FGR. El excoordinador de la campaña presidencial de Peña Nieto argumentó que la propiedad se adquirió por un fideicomiso donde, incluso, estaban sus hijos.
La institución a cargo de Alejandro Gertz Manero detalló que el exdirector de Pemex recibió un pago de cuatro millones de dólares de la empresa constructora cuando era coordinador de la campaña de Peña Nieto, en 2012, y solicitó las transferencias a través de una empresa de la que su hermana era beneficiaria, desde la cual se hizo la compra del inmueble que luego fue transferido a la esposa de Lozoya.
También acusó que Lozoya se reunió en las oficinas de Pemex con representantes de Odebrecht, quienes le solicitaron su apoyo para beneficiar contratos de obras públicas y le prometieron seis millones de pesos por hacerse de contratos de obras, como la refinería de Tula, Hidalgo.
El juez expuso que hay elementos para vincularlo por el delito de operaciones con recursos de procedencia ilícita, el cual deberá atenderse en las dos etapas en las que supuestamente se desarrolló, previo al 1 de diciembre de 2012, cuando no era servidor público, y a partir de 2013, donde ya era director de Pemex.
Sobre el delito de asociación delictuosa, aceptó el esquema en el que supuestaente participó la familia para triangular los recursos y hacerse de la propiedad.
Respecto al cohecho, también señaló que se acreditó que como funcionario pudo haber recibido seis millones de dólares para favorecer a la empresa brasileña a través de asignación de obras.
La FGR tiene seis meses para realizar la indagatoria complementaria.