En los últimos días, se iniciaron las transferencias adelantadas para 4.5 millones de adultos mayores que ordenó el gobierno federal como parte de las medidas para ayudar a este sector, uno de los de mayor riesgo, ante la epidemia de COVID-19.
Las personas mayores de 65 años recibieron 5,240 pesos en total, correspondiente a los bimestres de marzo-abril y mayo-junio, por lo que esos recursos deberán ser utilizados satisfacer sus necesidades por lo menos hasta julio.
Respecto al cuidado de los adultos mayores, el presidente Andrés Manuel López Obrador recomendó que “se procure tengan buena alimentación”.
Esta tarea resulta complicada cuando “una despensa ideal” puede costar 500 pesos, comprando una sola vez los productos por mes, y sin incluir otros gastos, como productos de cuidado personal, pagos de servicios o renta.
Paulina Magaña, coordinadora de salud alimentaria en el Poder del Consumidor, señala que una de las recomendaciones para la dieta de los adultos mayores y tomando en cuenta que el “monto no es muy alto”, es comprar frutas y verduras , que son la base para mantener un sistema inmunológico fuerte.
La experta recomienda que se consuman los productos de temporada debido a que son más accesibles y de bajo costo. Entre las frutas de temporada que se pueden encontrar ahora y que son buena fuente de vitamina C (que tiene un papel importante en el sistema inmunológico) están: la toronja, la naranja, la piña, el mango, la sandía y la guayaba.
Precios promedio según Profeco
Para contribuir a las vitaminas y minerales que reforzarán el sistema inmunológico también están las verduras, dice Magaña.
En este rubro también es importante que sean de temporada, porque son más accesibles. Aquí se encuentran productos como el nopal, la espinaca, el brócoli y la zanahoria, ésta última contiene vitamina A que refuerza el sistema inmunológico.
Precios promedio según Profeco
Además del primer grupo de frutas y verduras, hay otros alimentos que son de bajo costo y que pueden comprar los adultos mayores, como son los cereales, pero deben ser integrales y no harinas refinadas que quitan fibra y vitaminas y minerales.
“En este grupo de cereales podemos encontrar la avena que es también accesible y bajo costo o el amaranto, que también es una buena fuente de proteína y de fibra necesaria para mantener una buena función gastrointestinal”, dice la experta.
A la lista agrega el arroz, que también puede ser de bajo costo, y las tortillas, que forman parte de la alimentación tradicional, nutritiva y accesible.
Precio promedio según Profeco
También están los alimentos proteicos, que suelen ser un poquito más caros, como la carne, el pollo y los pescados, pero existen otras fuentes de proteína que son de bajo costo y de alta disponibilidad, como son los frijoles, las lentejas, el huevo y la leche, así como el atún y la sardina, sin embargo con éstos dos últimos hay que tener mucho cuidado porque generalmente el grupo de adultos mayores tiene factores de riesgo, como es el caso de la hipertensión, y en estos casos son buena fuente de proteína, pero para su conservación vienen acompañados de sodio.
Precio promedio según Profeco
“(El atún) sería buena opción para aquellos adultos mayores que no padezcan ninguna otra comorbilidad como la hipertensión, aquellos que tengan hipertensión sí tendrían que tomar medidas para disminuir el consumo de sodio”, advierte Magaña.
La investigadora comenta que estos productos pueden duran un mes, dependiendo de cuántas personas las consuman, pero son las recomendaciones de la “base de una alimentación saludable”, porque son de bajo costo, disponibles y de origen natural, y para toda prácticamente toda la población.
Al igual que la experta, la Universidad Autónoma de México (UNAM) divide los alimentos que se pueden comprar durante la contingencia sanitaria en grupos necesarios: frutas y verduras, cereales, alimentos de origen animal o proteicos, leche y yogurt, leguminosas, alimentos enlatados y sobre todo agua.
Consejos para hacer la despensa en tiempos de coronavirus:
Magaña agrega que de preferencia se compre en mercados o tiendas locales y evitar productos ultraprocesados que nos va a estar generando un gasto al bolsillo y no precisamente va a ser un alimentos nutritivo, como bebidas azucaradas, refrescos, jugos, cereales de caja que son azucarados, leches saborizada o yogur con azúcar añadida.
“Una de las recomendaciones es tener buena planeación para evitar ir de manera frecuente solo cuando sea necesario y si hay un servicio a domicilio, es muy útil para adultos mayores a quienes se ha recomendado no salir de casa”, afirma.
