Escuelas que no acreditaron serlo, maestros que no dieron clases, comisionados sindicales –de otras dependencias– y hasta políticos en cargos públicos que recibieron dinero destinado a la nómina educativa, son algunas de las irregularidades encontradas en los recursos ejercidos en 2018 del Fondo de Aportaciones para la Nómina Educativa (FONE).
De acuerdo con el informe especial "Pase de Lista Fone 2018" realizado por la Auditoría Superior de la Federación (ASF) se encontraron irregularidades por 1,138.8 millones de pesos, de los cuales están pendientes de aclarar 444.5 millones de pesos. De estos, el 74% (317.7 mdp) son inconsistencias en el FONE y 126.8 mdp del Ramo 25.
Esto pese a que en el gobierno de Enrique Peña Nieto se impulsó en 2013 una reforma educativa que pretendía “poner en cintura” los recursos que se destinaban para escuelas y maestros y prohibía que los comisionados sindicales siguieran cobrando un sueldo como profesores.