¿Qué se necesitaría para que el Insabi tenga la cobertura que se ha prometido?
El Insabi tiene corazón lopezobradorista, pero le falta la cabeza de los funcionarios de la 4T y fuera de los funcionarios de la 4T. Le hace falta que concurran todos los talentos dentro de la 4T y las voluntades fuera de la 4T. Se necesita que la apoyen todos los gobernadores, que no vean un negocio en la salud. Que vean un derecho para todos los mexicanos. Le hace financiamiento y eso sólo cobrando impuestos. Es mi posición personal. Pero el propósito y la aspiración nadie la puede criticar. Quien la quiera criticar es un traidor a la salud de los mexicanos. El propósito de una cobertura universal, igualitaria para todos los mexicanos.
¿La legislación salió apresurada, porque la oposición fue crítica y mencionó que le faltaba financiamiento? ¿Fue apresurado buscar tener un nuevo instituto?
Si usted le hace esa pregunta a quien se atiende de cáncer el apresuramiento es necesario; entonces, no tenemos nada contra quienes se atienden en los hospitales privados, pero yo, como mexicano, quiero que quienes se atienden en los hospitales públicos se atiendan con las mismas condiciones de calidad. Lo que el Insabi debe hacer es dejarse ayudar por el IMSS, convocar a todos los gobernadores, buscar las fuentes de financiamiento. Lo que debe hacer es dejarse ayudar por el IMSS-Bienestar que da consultas y medicamentos gratuitos a quienes no tienen seguridad social. Y que es mi propuesta. Yo no voté porque no me aceptaron esa reserva. Yo quiero que el Insabi se deje ayudar del IMSS, porque conozco el talento de las enfermeras, porque conozco el talento de los médicos, las doctoras, conozco la generosidad de quienes trabajan en el IMSS-Bienestar, atendiendo a los más pobres de México. Eso es lo que debemos hacer grande y yo estaré tranquilo si la experiencia y el talento del IMSS se vuelca en el Insabi.
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Dice que se necesitaban estos cambios, pero hemos recogido historias de cómo la atención ha cambiado y muchos no tienen atención…
Yo soy respetuoso de lo que dicen los medios, pero, a veces, las historias son muy de la Ciudad de México. Yo quiero que se atiendan en el primer nivel en Michoacán; en el segundo nivel y que no lleguen las historias hasta acá. No que se oculten, es decir, que la salud preventiva del primer nivel sea más exitosa. Que prevengamos el cáncer, la diabetes, eso sería el éxito y que no vengan las historias a los hospitales de tercer nivel de alta especialidad, muchos concentrados en la Ciudad de México, donde vienen esos dramas y esas tragedias.
Lo que tienen que hacer las personas para sacar a su familiar de un cáncer o de una diabetes o alguien que necesita un trasplante. Eso es porque ya fracasó el primer nivel, eso es porque fracasó la prevención de la enfermedad y eso no quiero. En eso, el sistema necesita entenderse. Las historias de la Ciudad de México se pueden prevenir. Si se atienden en el primero o segundo nivel. Pero sí hay que admitir que sí hacen falta reglas de transición. Y hay que insistir en que el Seguro Popular era un hoyo de corrupción, no es cierto que era un paraíso. El Seguro, ni era seguro ni era popular. Y el IMSS sí es Seguro y sí es Social, por eso quiero que le ayude al Insabi. Las historias de corrupción son tan dramáticas y dolorosas como los pacientes que los medios han reportado en los últimos meses. Las historias de corrupción de gobernadores de todos los partidos, que se robaban el dinero del Seguro Popular no eran un paraíso.
¿Están siendo mezquinos los gobernadores?
No quiero calificarlos, yo quiero que ayuden. La salud nos tiene que comprometer a todos, yo no quiero calificar a los gobernadores que no se quieren afiliar o que no quieren coordinarse en un esfuerzo por dar cobertura universal. Yo creo que tienen dudas, que se les debe despejar y una vez que se les despeje deben tener voluntad política para concurrir. Administrar una bolsa de dinero, sólo para administrarla, para hacer sus negocios, es tan condenable a nivel federal, estatal y municipal.