Los “Siervos de la Nación” se dedican a realizar el “censo del Bienestar” mediante el cual el gobierno de Andrés Manuel López Obrador construye un padrón de los beneficiarios de sus programas sociales.
El Tribunal Electoral determinó que la promoción de la imagen del presidente se realizó a través de la indumentaria que portaban, así como en la mención de sus logros en diversas frases y discursos emitidos durante la entrega de apoyos sociales.
No obstante, la autoridad electoral determinó que López Obrador no tiene responsabilidad porque no autorizó el uso de su nombre e imagen, ni participó en los hechos denunciados. Tampoco se concretó esa responsabilidad al partido político Morena.
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También fueron eximidos de responsabilidad Luisa Albores González, titular de la Secretaría de Bienestar, y Gabriel García Hernández, coordinador general de Programas para el Desarrollo del Gobierno Federal.
El Tribunal indicó además que la propaganda gubernamental denunciada pudo vulnerar el interés superior de la niñez, pues en diversas publicaciones hechas en las redes sociales de los programas de Bienestar se observa su imagen, sin que se demostrara contar con el consentimiento y la opinión tanto de los menores como de sus padres o tutores.
