Ante el incremento de crímenes de odio en Estados Unidos, el gobierno mexicano aumentará sus medidas de protección a connacionales radicados en este país, para lo cual se prevé un presupuesto de 142 millones de pesos.
El vocero de la Secretaría de Relaciones Exteriores, Roberto Velasco, señaló en conferencia de prensa que en 2017 se cometieron 7,165 crímenes de este tipo en la Unión Americana.
“Lo de El Paso fue para nosotros algo gravísimo, que nos preocupa y nos ocupa. Sí vemos que hay un aumento tanto de crímenes de odio como de organizaciones de lo que llaman la supremacía blanca”, comentó el funcionario.
Conoce más: Agresor de El Paso es parte de una red: Ebrard
Velasco explicó que México continuará planteando una defensa común de la cultura hispana ante el aumento de las ideas supremacistas, para lo cual el próximo 27 de agosto habrá un a reunión con un grupo de representantes de países de habla hispana para plantear una ruta común.
Además, detalló, a través del subsecretario para América del norte, Jesús Seade, se está convocando a organizaciones en Estados Unidos para hacer una defensa de la hispanidad y los mexicanos en ese país.
Tras el tiroteo en El Paso, Texas, –en el que murieron ocho mexicanos y seis más resultaron lesionados–, la Secretaría de Relaciones Exteriores lanzó la campaña #DenunciaElOdio, ello como una medida de protección consular.
El director general de Protección a Mexicanos en el Exterior, Julián Escutia, informó que también se han capacitado a 300 funcionarios para atender crímenes de odio, grupos extremistas y acoso cibernético.
Lee además: Gertz Manero se reúne con Embajada de EU y FBI por tiroteo en El Paso
Sobre la política de protección consular a los connacionales afectados por este atentado, informó que el gobierno mexicano apoyó a las familias con trámites funerarios y traslado de los cuerpos de los mexicanos que fallecieron en el tiroteo el pasado 3 de agosto.
Además autoridades mexicanas, entre ellas el Fiscal General de la República, Alejandro Gertz Manero, se han reunido con representantes de la justicia estadounidense para interponer cargos penales contra el autor del tiroteo.
