Entre ataques, interrupciones inesperadas y poco entusiasmo se llevó a cabo el segundo y último debate entre los candidatos a la dirigencia nacional del PRI, donde el gobernador con licencia de Campeche, Alejandro Moreno e Ivonne Ortega exmandataria de Yucatán, se engancharon en un cruce de acusaciones.
En el encuentro realizado en el auditorio Plutarco Elías Calles, en el CEN del PRI, Ortega y Moreno se enfrascaron en acusaciones de corrupción, y de tener millonarias mansiones y propiedades, señalamientos se escucharon también en el primer debate.
Ivonne Ortega lanzó el primer dardo al preguntar a su rival, que aventaja en las encuestas, si quería ser recordado como alguien que acordó con “algunos” para poder ser candidato.
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