El homicidio de tres estudiantes originarios de Pánfilo Natera, Zacatecas, y el secuestro y feminicidio de una madre y su hija en Apatzingán, Michoacán, provocaron movilizaciones en las últimas horas.
El 29 de septiembre, la Fiscalía General del Estado de Michoacán inició carpeta de investigación con relación al hallazgo de los cuerpos sin vida de una mujer y una niña en Apatzingán.
Ese mismo día y durante las jornadas siguientes, pobladores del municipio michoacano protestaron en la plaza central y hasta en la casa del alcalde José Luis Cruz, quien se comprometió en coadyuvar en las investigaciones.
La mujer y la niña, de 29 y 8 años, respectivamente, habían sido reportadas como desaparecidas días antes. Las localizaron en la colonia Bugambilia. La Fiscalía de Michoacán señaló que a simple vista presentaban huellas de violencia.
“En el lugar, la FGE realiza actuaciones en materia pericial en sus diferentes disciplinas, en coordinación con la Unidad Especializada de Combate al Secuestro (UECS), en virtud de que existen indicios de que las víctimas habían sido privadas de su libertad, hecho que fue denunciado dos días después de haberse cometido”, detalló.
El viernes 30 de septiembre, el ayuntamiento de Pánfilo Natera confirmó el homicidio de Francisco, Juan y José, estudiantes universitarios que provenían de la comunidad El Saucito.
La autoridad se unió a la pena que embarga a los amigos y a la familia de los jóvenes. “Deseamos pronto consuelo, brindamos todo nuestro apoyo, solidaridad y afecto”, señaló.
A través de redes sociales, pobladores de Zacatecas llamaron a marchar para exigir a las autoridades que den con los responsables del ataque a los estudiantes. La movilización ocurrirá el 3 de octubre.
Michoacán y Zacatecas son dos entidades disputadas por grupos de la delincuencia organizada. Ambas han liderado en los últimos años los índices de homicidios y otros delitos.
