Durante ese día, ningún médico legista o forense acudió a certificar del estado de salud de la menor ni a realizar el estudio ginecológico y proctológico. “Fue hasta después de que el Observatorio Ciudadano Nacional del Feminicidio (OCNF) se pusiera en contacto con la Subprocuradora para la Atención de Delitos Vinculados a la Violencia de Género de la Procuraduría General de Justicia del Estado de México, Dylcia García, cuando fue enviado el Médico legista, el jueves 22 de agosto por la tarde”.
Al recuperar la memoria -ocho horas después de estar inconsciente-, Karla mostró a sus padres los golpes que tenía en su cuerpo, pero en el hospital sólo le realizaron pruebas ginecológicas superficiales “no los estudios necesarios y a profundidad que pudieran descartar con certeza una violación sexual”.
Pese a que el hospital descartó la existencia de una violación, suministró a Karla una pastilla del día siguiente y otra contra el VIH, sin previa autorización de la madre y el padre, “lo que no concuerda con el dicho del Hospital, al descartar la violencia sexual”.
El sábado 24 de agosto la médico Yaneli Vilchis Venegas dio el “alta” de Karla manera verbal aunque no había entregado a la familia el resultado del antidoping, lo que horas más tarde hizo y sólo manifestó a la familia que la “muestra no era clara”. Los padres solicitaron que se hiciera una nueva prueba, pero la doctora Vilchis se negó a realizarla “hasta que le fuera presentado un oficio por parte de la Fiscalía (General del Justicia del Estado de México”, por lo que “la droga que se le suministró no fue identificada”.
“Esto es grave, primero, porque no es el primer caso relacionado con el suministro de drogas y/o sustancias que impactan en la salud de jóvenes y niñas, por lo que la obstaculización de la Dra. frenó una investigación que pudiera derivar no sólo en la identificación de la droga, sino en la del modus operandi que está violentando la integridad física y emocional de niñas y jóvenes y que pudiera estar relacionado con los delitos de violencia sexual, desaparición, trata o incluso el feminicidio”, alertó el OCNF.