De acuerdo a Cortés Mendoza, “en conjunto” los líderes de la oposición en México construyen una serie de requisitos para que quien aspire a la candidatura presidencial, lo encabece la candidatura más competitiva y cuenten con un mínimo de reconocimiento social.
“Tomando en cuenta la opinión de la sociedad, estamos construyendo requisitos de competitividad con el objetivo que nuestra candidata o candidato en el 2024 no solo quiera, sino también pueda ser presidente”, tuiteó el pasado 23 de mayo.
Esa postura no fue bien recibida por el líder nacional perredista, Jesús Zambrano, quien se pronunció por método abierto, democrático, transparente, incluyente y participativo, sin dejar de lado a la sociedad civil.
Ello, derivó en nuevas reuniones entre las dirigencias nacionales del PAN, PRD y PRI, ésta última encabezada por Alejandro Moreno.
Incluso, éste último no vio mal que él o la candidata de la alianza Va por México deba recabar el casi millón de firmas, pues observó que los abanderados de su partido podrían juntas sin problema esos apoyos.
Lo cierto es que los líderes de la oposición continúan en pláticas para encontrar el método o métodos de selección, o una mezcla de ellos que les permita arribar a consensos para designar a él o la candidata del bloque opositor, mismo que también deberá contar con el apoyo de la sociedad civil.