“El dictamen busca dar certeza en cuestión de derecho internacional, además este es insuficiente y la norma administrativa ha quedado rebasada, estableciendo canales adecuados de interlocución y medidas estrictas para propiciar el respeto a nuestra ley”, señaló la diputada Rocío Barrera Badillo, de Morena.
Las bancadas de PAN y MC se opusieron a estos cambios. De acuerdo con legisladores de Movimiento Ciudadano no se consideraron las consecuencias que la reforma tendrá en la cooperación internacional y seguridad interna del país.
“Consideramos que los cambios que se proponen analizar en relación a las actividades de enlace para el intercambio de información con autoridades mexicanas que desarrollan los agentes extranjeros en el territorio nacional no deben de realizarse en la Ley de Seguridad Nacional, ya que estas se enmarcan dentro de las relaciones entre los Estados y no exclusivamente en lo relacionado a la seguridad nacional, sus riesgos y amenazas”, señaló la diputada Carmen Julia Prudencia González, de esta bancada.
Por su parte, la diputada Adriana Dávila expuso que los “convenios de cooperación internacional no deben ignorarse” y señaló que estos cambios pueden tener efectos no solo en temas de seguridad, sino que tiene implicaciones en materia de comercio, inversión, flujos económicos y migración.
“No lo duden, serán consecuencias muy negativas, porque las empresas extranjeras que impulsan la inversión, el comercio con México, consideran aspectos relacionados con la seguridad para gerentes, empleados e instalaciones, para todas las naciones que invierten en nuestro país”, afirmó.