Esta medida se da luego de los disturbios ocasionados por un grupo de encapuchados en la primera marcha sobre esta temática, el pasado 4 de julio, donde fueron afectados decenas de establecimientos.
¿Cuál es el nuevo protocolo?
A través de un comunicado, la Secretaría de Gobierno detalló que la Brigada de Diálogo y Convivencia, integrada por la Instancia Ejecutora del Sistema Integral de Derechos Humanos (IESIDH) y la Dirección General de Gobierno (DGG), desplegará personal en la zona de la manifestación para establecer un diálogo con los manifestantes, escuchar sus demandas y, en su caso, dar respuesta a sus solicitudes.
En caso de que se detecte que alguna o alguno de los participantes porte algún objeto que pudiera ser utilizado para agredir, los funcionarios desplegados establecerán un canal de diálogo para invitar a las personas a entregarlos.
Sin embargo, el protocolo también autoriza la intervención de la policía. En caso de negarse a entregar los objetos, el personal policial canalizará a dichas personas hacia zonas de menor riesgo, con el propósito de proteger al resto de las y los manifestantes y evitar conductas agresivas.
El protocolo también contempla el resguardo de establecimientos mercantiles o inmuebles públicos y privados, así como del mobiliario urbano, por parte de elementos de la policía capitalina.
“Conforme al protocolo establecido, Es importante mencionar que el personal policial de la SSC contará únicamente con equipo de protección corporal: cascos, rodilleras, coderas, escudos y, en algunos casos, extintores, para atender posibles conatos de incendio”, señala el documento.