Estrategias frente a un clima más agresivo
Las investigaciones realizadas por la universidad documentan el efecto de la urbanización en el clima. El fenómeno "isla de calor" eleva hasta 10°C la temperatura urbana, alterando los patrones de lluvia.
Además, la pérdida de áreas verdes y cuerpos de agua agrava la magnitud de las lluvias. La universidad estima que, para 2050, las grandes ciudades en México podrían calentarse dos grados más que el promedio global.
Ante este panorama, los eventos como el del 2 de junio podrían volverse más comunes. Por eso, la casa de estudios plantea modelos de desarrollo con control territorial e infraestructura verde.
Zonas de riesgo y soluciones desde la ciencia
El Instituto de Ingeniería propone delimitar Zonas de Desarrollo Controlado (ZEDEC), con base en modelos hidrológicos y geotécnicos. Estas zonas buscan contener la urbanización en áreas propensas a inundaciones.
A la par, se promueve el uso de infraestructura verde como parques, jardines de infiltración y bosques urbanos. Estas soluciones permiten captar agua, recargar acuíferos y reducir la temperatura.
Entre 2003 y 2006, la capital del país perdió 12% de sus áreas verdes interurbanas, lo que contribuyó a aumentar la vulnerabilidad ante lluvias intensas, según datos de la máxima casa de estudios.
Tecnología, educación y anticipación
Herramientas como UNIATMOS y SISPER permiten acceder a datos climáticos y visualizar escenarios de riesgo con base en modelos predictivos. Estos sistemas ayudan a tomar decisiones con anticipación.
Desde la investigación hasta la acción preventiva, la universidad busca que la sociedad comprenda y responda ante el cambio climático. El objetivo es que eventos como el del 2 de junio no sorprendan sin preparación.