Elecciones y normativas, los principales retos de la Línea 3 del Cablebús
El proyecto más corto de las tres rutas de Cablebús que se habilitaron durante la primera administración de Morena en la CDMX no estuvo exenta de retos.
La Línea 3 de Cablebús fue el último gran reto de Andrés Lajous al frente de la Secretaría de Movilidad en la Ciudad de México (Semovi), tras años de desafíos y aprendizajes para constituir, por primera vez en la capital del país, sistemas teleféricos.
La tercera experiencia, que siguió las rutas de Cuautepec e Iztapalapa, no estuvo exenta de obstáculos. Las normativas y el proceso electoral le agregaron complejidades extras al proyecto como retrasos en la edificación y protestas por el impacto medioambiental que, de acuerdo al titular, tuvieron tintes políticos.
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El reto de construir en la ciudad y en zona patrimonial
Uno de los principales “cocos” de la construcción de infraestructura para transporte siempre es la liberación del derecho de vía, sobre todo en la zona del Valle de México que está altamente densificada, que en este caso se tradujo en intervenir zonas consideradas patrimonio cultural, lo que requería otro tipo de normas, y hasta sortear una vialidad como lo es el Segundo Piso del Periférico.
En la Línea 1, por ejemplo, la negociación con las familias que habitaban en la ruta del Cablebús fue una labor titánica, que implicó la compra de viviendas a precio de mercado y el arreglo de algunas más que no interferían, pero resultarían afectadas por las instalaciones.
Pero en el caso de la Línea 3, las complicaciones fueron de otro tipo, señala Andrés Lajous. “Fueron menores retos en términos de afectaciones de los vecinos porque en realidad hacemos una intervención menos directa en zonas residenciales, pero sí hubo un poco más en términos de normatividad”, dijo el funcionario en la presentación del estudio ¿Qué aprendizajes nos ha dejado la implementación del Cablebús?, del Instituto de Políticas para el Transporte y el Desarrollo (ITDP).
El titular de la Semovi destaca el paso por zonas patrimoniales, como el Lienzo Charro, que fue impactado de manera directa (incluso hay una estación con su nombre), y la Casa Estudio Luis Barragán, cuya vista desde la azotea (también valorada dentro de su clasificación como obra patrimonio) iba a ser afectada.
En el caso del segundo inmueble, incluso en los primeros meses del proyecto la ruta se tuvo que modificar, lo que implicó más tiempo de planeación y edificación.
Aunque Chapultepec es el atractivo principal de esta ruta, también representó retos ya que implicaba un mayor cuidado a la flora y fauna local, además de implicar restricciones de diseño para respetar su estructura.
Un desafío más que se sumó al trazado del trayecto, que va de Los Pinos a Vasco de Quiroga, fue el Segundo Piso de Periférico. “Ese es un reto que siempre va a tener la ciudad en términos de obras”, agregó el funcionario.
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Aunque fueron pocas las zonas habitadas atravesadas, vecinos de la ruta sí implican una gran labor de escucha y comunicación activa. “Hay zonas de la ciudad que por muchas razones no han recibido la atención que requerimos, y su tú eres vecino de esa zona, cuando ves que se está haciendo un proyecto grande, pues es la oportunidad para hacer visible cuáles son las deficiencias, lo que me parece totalmente legítimo”, detalló.
Algunas de las principales inquietudes de los vecinos son las cavernas que se encuentran en la zona ya que tenían inquietud sobre si su existencia, conjugada con la construcción debilitaría las estructuras de las edificaciones circundantes, por lo que el equipo del Cablebús explicó todos los estudios realizados que garantizaban su seguridad.
La obra tuvo retos particulares por la zona en la que se desarrolló, ya que interfería con zonas patrimoniales y de especial cuidado medioambiental. (Edgar Negrete Lira)
Elecciones, el detonador de intervenciones
Las mayores oposiciones se dieron durante la contienda electoral, indicó Lajous en la presentación del informe en el que también colaboró el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). “Claro que hay algunas afectaciones ambientales, pero también estábamos en un contexto de campaña y era muy difícil que no se aprovecharan los actores políticos, pero también es legítimo, esa es la política”, detalló.
En donde se complicó la discusión fue en el Centro de Desarrollo Infantil (Cendi) San Miguel Chapultepec, ya que una de las torres queda justo al frente de la escuela. El funcionario indica que en las negociaciones, además de los padres de familia, también hubo personas interesadas en la política, pero el conflicto se solucionó con información.
La experiencia
El sistema teleférico tiene una historia de más de 100 años con principales usos en Europa, pero su desarrollo en ciudades, y principalmente en Latinoamérica, es reciente.
Su implementación en la Ciudad de México por primera vez nació de una necesidad de justicia social. “Se nos pidió un sistema de transporte que conectara zonas rezagadas, pero que fuera de la mejor calidad posible”, esto, sumado a las complejidades topográficas que hay en las rutas, arrojó al teleférico como la mejor opción.
En la presentación del proyecto y del inicio de obras estuvieron Sheinbaum y otros funcionarios, como Andrés Lajous, secretario de Movilidad, y Clara Brugada, alcaldesa de Iztapalapa.(Gobierno de la CDMX)
Pero para hacerlo realidad no se necesitó sólo la creación de un proyecto, sino el aprendizaje de la tecnología a utilizar, la creación del concepto y grupo de trabajo Cablebús.
Lajous, a quien le queda una semana en el gobierno de la Ciudad de México, dice que continuar con la expansión del servicio no será sencillo, pero las bases están sentadas y considera, que la propuesta de Clara Brugada, jefa de gobierno electa, de construir cuatro líneas más, es acertada.
