El más reciente incendio en el Mercado de Sonora puso sobre la mesa el inicio de pláticas entre autoridades y locatarios para cambiar el giro comercial del lugar y erradicar de manera paulatina la venta de animales vivos, con lo que se busca evitar posibles casos de maltrato.
La mañana del jueves 4 de noviembre se registró un incendio en el inmueble ubicado en la alcaldía Venustiano Carranza. De acuerdo con el peritaje, el siniestro fue ocasionado por un cortocircuito en la zona de comida.
El incendio afectó a locales de venta de veladoras, plantas medicinales e imágenes religiosas, pero muy cerca de ellos se encuentra la sección de venta de animales vivos. En el Mercado de Sonora se permite la venta de animales vivos porque desde su creación en 1957 se expidieron cédulas que contemplan ese giro comercial.
Aunque esos puntos no infringen la ley, organizaciones de la sociedad civil alertan sobre que en este sitio por décadas se ha denunciado que los animales sufren maltrato, hacinamiento y condiciones insalubres, por lo que nuevamente llaman a poner fin a su comercialización.
Las asociaciones consideran que el incendio también exhibió falta de visión de las autoridades y omisión ante la violación a los derechos de los animales, ya que, durante el desalojo, diversos locatarios sacaron sus pertenencias y jaulas con gatos, pollos y otras especies, con lo que mostraron en qué estado se encontraban esos seres vivos.
Ante ello, funcionarios del gobierno central y de la alcaldía anunciaron que buscarán un cambio de giro comercial en el Mercado de Sonora, para eliminar de manera gradual la venta de animales. Incluso, contemplan que en un plazo de seis a nueve meses la mayoría de los locatarios cambie totalmente su negocio.
Un día después del incendio, la jefa de gobierno de la CDMX, Claudia Sheinbaum, afirmó en conferencia de prensa que su administración y otras autoridades buscarán acercamiento con los locatarios, para generar alternativas de venta de productos y que se elimine la de animales.
En entrevista con Expansión Política, la alcaldesa en Venustiano Carranza, Evelyn Parra, confirmó que esta semana ya se instaló la primera mesa de trabajo con los locatarios, para hacer una llamada de atención sobre las condiciones en las que se encontró a los animales tras el incendio.
Parra reconoció que la venta de animales en el lugar no es ilegal y consideró que lo que se requiere es evitar que haya maltrato o condiciones insalubres. Para ello comenzaron las pláticas formales, en las que también participará la Secretaría de Desarrollo Económico (Sedeco), para ofrecer alternativas e incluso créditos para cambios de su giro comercial.
"Ellos (los representantes de la Sedeco) dijeron que también podemos traer créditos para que podamos ir dejando a los animales, para que ya puedan ir teniendo otro giro más permitido, más novedoso, y sobre todo que no implique un riesgo para los animales o en condiciones que no nos gusta ver a nadie", dijo la alcaldesa.
Parra aseguró que en estas reuniones los locatarios están abiertos a escuchar las propuestas de las autoridades y alternativas para el cambio de giro. Otro actor que participa en estos diálogos es la Secretaría del Medio Ambiente (Sedema).
"Esto no va a ser pronto, estamos calculando un plazo de seis meses, ocho meses, nueve meses, dependiendo de los apoyos que puedan llegar; (para entonces) ya debemos tener un avance importante", dijo.
Adriana Buenrostro, coordinadora de la organización social Animal Heroes, consideró que el anuncio de reconvertir los giros comerciales para evitar la venta de animales en el Mercado de Sonora debe observarse desde un punto de vista ético, ya que no basta con escudarse en las cédulas que permiten esta práctica, sino que se debe hacer cumplir las leyes en materia de protección animal y perseguir las denuncias.
"¿Cuánto tiempo más debemos dar para que los animales dejen de sufrir? El maltrato animal está considerado como un delito en la Ciudad de México; entonces, no hay motivo sustentado que pueda obviar este bien mayor", dijo Buenrostro.
La activista criticó que las denuncias interpuestas por Animal Heroes y otras organizaciones no hayan sido atendidas por autoridades como la Brigada de Vigilancia Animal, la Procuraduría Ambiental y la alcaldía Venustiano Carranza, al grado de que, después del incendio del 4 de noviembre, los locatarios siguieron vendiendo animales en la vía pública.
Para la diputada panista Ana Villagrán, integrante de la Comisión de Bienestar Animal en el Congreso de la ciudad, el plazo de hasta nueve meses dado por la alcaldesa en Venustiano Carranza para la reconversión de los giros comerciales es muy amplio, cuando es necesaria una acción inmediata.
"¿Qué le cuesta actuar mañana mismo? Si el encargado de los mercados públicos del gobierno le contesta el teléfono, creo que la estrategia (de cambio de giros comerciales) puede aplicarse la próxima semana, ese mercado es el epicentro del maltrato animal", dijo.
La legisladora celebró que la Agencia de Atención Animal del gobierno capitalino y otras autoridades acudieran al mercado durante el incendio, pero señaló que a su consideración tuvieron "mano suave" por no retener las jaulas donde había signos de maltrato.
En respuesta a las críticas por posible omisión con las denuncias de maltrato animal, la alcaldesa Evelyn Parra insistió en que el cambio de giro comercial para los locatarios del mercado debe ser paulatino para evitar conflictos entre las partes, por lo que pidió un voto de confianza a las organizaciones sociales.
"Sí hay tres clausuras (de locales de venta de animales) anteriores al incendio, donde no hicieron caso al tema del maltrato animal; lo que estamos haciendo es seguir hablando con ellos, no debe haber nada de hacinamiento, ahora sí está prohibida la venta de animales afuera del mercado, pero hay gente muy ética que respeta las leyes y otras que lo hacen hasta a escondidas", señaló.
