A sus 31 años, Raúl de Jesús Torres Guerrero se convertirá en el primer diputado que representará a los chilangos que viven en el extranjero, durante la segunda legislatura del Congreso de la Ciudad de México, como parte de la bancada del Partido Acción Nacional (PAN).
Sin embargo, la figura del "diputado migrante", -considerada en la Constitución de la Ciudad de México-, nació en medio de impugnaciones en tribunales por un intento de desaparecer y fue parte del proceso electoral 2021 sin reglas claras, tanto para la postulación de aspirantes, como para su funcionamiento, una vez electo.
Para Raúl Torres, el reto a partir de septiembre próximo, cuando tome posesión como diputado migrante, no solo será impulsar una agenda a favor de la comunidad de capitalinos residentes en otras partes del mundo, sino también generar las leyes secundarias que quedaron pendientes desde la extinta Asamblea Legislativa del Distrito Federal, para que futuros legisladores de esta categoría tengan herramientas jurídicas que le permitan operar sin necesidad de estar presentes en el recinto de Donceles y Allende.
La nueva configuración del congreso, con varias curules ganadas por partidos de oposición -aunque no llegan a la mayoría- y una disminución de fuerza como grupo parlamentario por parte de Morena, le permitirá al nuevo diputado migrante, tener margen para la negociación.