El gobierno de la Ciudad de México permitirá la realización de partidos y entrenamientos de béisbol y futbol profesional a partir del próximo lunes, aunque deberán hacerlo a puerta cerrada y sin público.
El acuerdo por el que se anunció la reanudación de estas actividades deportivas fue publicado este viernes en la Gaceta Oficial de la CDMX.
Según se apunta en el acuerdo, una regla para la realización de los partidos, es que "todas las personas que participen en los torneos deportivos deberán contar, 72 horas antes de cada competencia, con un resultado negativo de COVID-19, derivado de la aplicación de una prueba rápida de antígeno, o bien, prueba RT-PCR de reacción en cadena de la polimerasa".
Además, queda prohibido compartir botellas de agua, toallas u otros objetos personales, así como la operación de bebederos.
Este viernes, la jefa de gobierno de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, en conferencia de prensa donde anunció que la capital se quedaría una semana más en semáforo naranaja, fue cuestionada sobre la reapuertura de los estadios deportivos.
Sheinbaum reconoció que su gobierno se mantenía en pláticas con los equipos de la Liga MX con sede en la capital, aunque omitió el anuncio de que autorizaría los entrenamientos y partidos a puerta cerrada a partir de este lunes.
"Estamos en contacto con ellos, pero esta semana consideramos que es prudente mantenernos como estamos", dijo.
La jefa de gobierno agregó que la apertura de los inmuebles deportivos, como los estadios de futbol, es importante por la reactivación económica, por lo que no descartó su apertura al público en semáforo amarillo.
"Estamos viendo de qué manera podemos recuperar esta actividad (futbol). Estamos a cuatro puntos del amarillo. Esto significaría no sólo la posibilidad de los aficionados (para volver a los estadios), sino por la reactivación económica", dijo.
Sheinbaum también destacó que pese que se ha registrado una reducción en el número de hospitalizaciones por COVID-19 y de casos detectados, la capital está "a cuatro puntos" de pasar al color amarillo, según el rango de estimación de riesgo de contagios de COVID-19 elaborado por el gobierno federal.
Estamos a cuatro puntos de que la Secretaría de Salud del gobierno de México nos coloque en el amarillo".
Por ello hizo un llamado para que la ciudadanía no baje la guardia ni relaje las medidas de prevención de contagios durante las próximas vacaciones de Semana Santa.
