“En el caso de los Mexicráneos ya se van a quitar, a partir del día de hoy. Es importante que la ciudad siga viva, sus actividades culturales sigan vivas; pero si esto generó un problema de que no se guarda sana distancia y demás, pues los estamos retirando para que no se conviertan en un factor que promuevan los contagios”, dijo la mandataria en videoconferencia el viernes al mediodía.
Aunque se tomaron medidas para evitar contagios como la constante sanitización de las piezas y un “anfitrión” asignado a cada cráneo para vigilar que se mantuviera la distancia entre las personas así como el uso de cubrebocas, la concentración del público rebasó a las acciones preventivas.
Además el Instituto de Verificación Administrativa (Invea) intensificó desde este fin de semana la vigilancia de antros y bares cuya operación aún se encuentra prohibida en semáforo naranja, y sólo pueden abrir como restaurantes con 30% de aforo después de registrarse ante el Gobierno capitalino.
Suspenden bares
Personal del Invea suspendió dos establecimientos no respetar las medidas: un bar en la colonia San Rafael, en Cuauhtémoc y otro en Prados Coapa, en Tlalpan, indicó el instituto en una tarjeta informativa.
La Ciudad de México podría volver a cerrar negocios y actividades a mitad de noviembre si continúa el aumento de hospitalizaciones de pacientes con COVID-19, advirtió la jefa de Gobierno en un mensaje a la ciudadanía, también este viernes.
No estamos en el nivel de regresar al semáforo rojo (...) pero tampoco estamos en condición de abrir nuevas actividades".
Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la CDMX
Sheinbaum indicó que entre el 10 y el 19 de octubre se pasaron de 2,565 personas hospitalizadas a 2,795 personas, lo que representa un incremento de 23 pacientes por día en promedio. En los últimos tres días esta tendencia se detuvo en 2,769 personas.
La Ciudad de México seguirá en semáforo naranja con alerta durante la semana del 26 de octubre al 1 de noviembre.