Sheinbaum reconoció que aún hace falta una mayor información a la población respecto a estos ejercicios que apuestan a fortalecer la cultura de prevención pues –según dijo– se presentaron nueve casos de crisis nerviosa y tres personas lesionadas.
Juan Manuel García Ortegón, titular del Centro de Comando, Control, Cómputo, Comunicaciones y Contacto Ciudadano (C5), explicó que la alerta sísmica dura lo mismo en cualquiera de los medios en los que esta se emite; es decir, un minuto con un tiempo máximo de diferencia entre un poste y otro de alrededor de 17 segundos.
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“La alerta está organizada para que suene primero en zonas donde es más probable que hayan afectaciones durante un sismo… de los 14,588 postes que tenemos, 3,500 ya están con el nuevo sistema que nos permite garantizar una diferencia de 3 segundos entre el poste que suena más rápido y más lento”, explicó.
De acuerdo con Sheinbaum, de los 8.9 millones de habitantes de la ciudad, y los 4 y 5 millones de visitantes que se registran diariamente, este lunes se tuvo una participación de 8 millones de personas.
El macrosimulacro supuso un sismo de 7.0 grados con epicentro en el municipio de Acambay, en el Estado de México. Este ejercicio es el primero de tres previstos para este año. Los otros dos tendrán lugar en mayo y septiembre. Su propósito es evaluar la respuesta tanto de los ciudadanos como de las autoridades capitalinas.
Este primer macrosimulacro contó con la participación del Servicio Sismológico Nacional, el Instituto de Ingeniería de la UNAM y la Coordinación Nacional de Protección Civil.