Desde microbuses y combis hasta camiones y autobuses de la Red de Transporte de Pasajeros (RTP)... Este martes, fueron presentadas en la Macroplaza de Iztapalapa las primeras unidades del transporte público equipadas con un sistema de monitoreo que busca inhibir los asaltos.
Hasta el momento son 400 vehículos con cámaras y GPS. Se trata de automotores que circulan en la alcaldía de Iztapalapa, aunque el objetivo es que llegar a 16,000 al final de este año, anunciaron autoridades capitalinas.
Se prevé que las cámaras de distribuyan así:
Las unidades equipadas podrán ser ubicadas a través de GPS. Se podrá tener imagen en tiempo real en el centro de monitoreo del C5 cuando se active el botón de pánico, aunque las cámaras estarán grabando permanentemente.
El costo de la instalación de las cámaras, el equipo y el seguimiento será de 313 millones de pesos.
Aunque desde 2014 las unidades deben contar con sistemas GPS, de acuerdo con la Ley de Movilidad de la Ciudad de México, esto no se había cumplido, señaló este martes la jefa de gobierno, Claudia Sheinbaum.
“Era obligatorio desde el 2014 la instalación de GPS en las unidades, pero también por temas de la tarifa los transportistas no tenían los suficientes recursos para ello”, dijo.
“Finalmente, lo que nos interesa es erradicar la inseguridad, tener un transporte seguro en todos los sentidos: seguro en términos de que no haya delincuencia y seguro también en términos de brindar una mejor movilidad a todos los habitantes”, agregó.
La alcaldesa de Iztapalapa, Clara Brugada, señaló que las unidades también se equiparán con pantallas que serán adquiridas con recursos de la alcaldía.
“El robo a bordo del transporte público es uno de los que (delitos) más creció en los últimos años (...) A los habitantes de la periferia que no tienen cerca el Metro y tienen que abordar el sistema de transporte concesionado, entre más larga es la ruta más se exponen”, reconoció.
Justo un día antes de la presentación de las unidades en Iztapalapa, integrantes de la asociación Fuerza Amplia de Transportistas (FAT) se manifestaron en rechazo a la instalación del sistema antiasaltos. Acusaron que es un paso para el conteo de pasajeros e ingresos, para que esto después sirva para concentrar el cobro en el gobierno capitalino a través de una tarjeta de transporte multimodal.
“Nosotros en este caso estamos pagando la cámara, el GPS y la transmisión de datos. Entiendo que tengan una opinión, pero es una obligación tenerlo”, respondió al respecto el secretario de Movilidad, Andrés Lajous.
“Cuando dicen que están en contra, lo que están diciendo es que están en contra de la ley”, señaló en entrevista.
Cuando el responsable de una unidad haga el trámite de revista vehicular, la instalación de los equipos se hará de forma obligatoria. Para ello se plantean dos fases.
Primero, se instalaron equipos en tres Centros de Transferencia Modal (Cetram) en Xochimilco, Periférico Oriente y Buenavista, del 15 al 31 de julio.
La segunda fase irá de la mano con la revista vehicular realizada por la Secretaría de Movilidad (Semovi). La instalación se hará en los tres Cetram mencionados, en cinco módulos de la RTP y en un módulo del STE. Este proceso inició el 1 de agosto y terminará el 31 de diciembre.
