Félix Salgado Macedonio alardea: “si no estamos en la boleta, no hay elección”. Amenaza con impedir las elecciones del próximo 6 de junio en Guerrero. Le parece poco. Al día siguiente cuelga una corona de muertos en la entrada principal del Instituto junto a una manta donde aparece el Consejero Presidente, Lorenzo Córdova, y el consejero electoral, Ciro Murayama. Aún más, acompaña la escenificación con un ataúd en el que se lee: “Lorenzo. Cuenta tus días rata-demonio”. Por si esto no fuera poco, remata diciendo: si el INE no se reivindica, los vamos a hallar a los siete (consejeros y consejeras). Los vamos a buscar y vamos a ir a ver a Córdova a su casa…”
Mario Delgado, presidente de Morena, lo excusa argumentando que el ataúd simboliza la pérdida de credibilidad y confianza al Instituto. Mentira por partida doble. El féretro no tenía el nombre del Instituto y el INE es hoy en día la institución civil que registra más confianza por parte de la ciudadanía y la cuarta si se toman en cuenta organizaciones e instituciones. Según la ENCUCI 2021, casi el 60% de las personas dicen confíar mucho o algo en el INE, [1] porcentaje que más o menos ha sostenido en los últimos veinte años. [2]
En realidad hablan de regresión autoritaria cuando están encabezando una: “el INE ya murió, el INE ya no tiene sentido de existir”, repite Macedonio. Se adolece porque el instituto aplicó la ley, el artículo 456, 1, c) fracción III, y le retiró la candidatura, pues esa es la sanción establecida para quienes no presentan su informe de ingresos y gastos de precampaña.
Salgado se defendió diciendo que él no había sido precandidato y que la persona que aparecía como tal en los videos no era él. Luego explicó que sí era el del video pero que no omitió la entrega de su informe sino que lo hizo de forma extemporánea. Finalmente, terminó argumentando que no lo entregó pero que merece una pena “menor. Es decir, violó la norma pero ¿qué tanto es tantito?