¿Cómo encontrar la imagen definitiva para retratar a un gobierno? Al de López Obrador en México le resta demasiado tiempo como para elegir una, aunque opciones no faltan. El de Donald Trump es otra historia. Al de Trump ya podemos identificarlo claramente con una sola imagen, paradigmática de la ignorancia, irresponsabilidad y crueldad de este gobierno que merece el basurero de la historia.
Hace unos días, después de decretar por su cuenta su alta del hospital médico militar Walter Reed (¿a cuántos otros hombres de 74 años, sobrepeso y colesterol alto les habrían permitido dejar el hospital tan pronto?), Donald Trump subió al helicóptero y volvió a la Casa Blanca. Una vez en la residencia presidencial, Trump buscó el balcón más alto y, mirando a las cámaras, se arrancó la mascarilla sanitaria, la metió en el bolsillo de su saco, dio la media vuelta y se metió de vuelta a ese nido de contagio en el que se ha convertido, en los últimos días, la casa del presidente.