En 2019, Amnistía señaló que México es uno de los países más peligrosos para las personas que defienden los bosques, los animales, los mares y los ríos. Tan solo ese año, siete activistas fueron asesinados en el país.
Al asesinato de Adán Vez le antecedieron los de otros tres defensores del territorio y de los derechos humanos.
Paulina Gómez
La "guardiana del territorio sagrado de Wirikuta" fue asesinada el pasado 22 de marzo en El Salvador, Zacatecas.
Paulina Gómez, de 50 años de edad y originaria de San Luis Potosí, desapareció el 19 de marzo. Tres días después, la Fiscalía General del Estado (FGE) de Zacatecas confirmó el hallazgo de la activista.
Los datos de la necropsia revelaron que la defensora del territorio murió por disparo de arma de fuego. Antes de encontrar el cuerpo, las autoridades localizaron el auto de la víctima y lograron arrestar a un hombre que trató de atacarlos con un cuchillo.
Isaac Herrera
El 23 de marzo, un día después de que se confirmó el crimen de Paulina Gómez, el activista Isaac Medardo Herrera Avilés fue asesinado en la puerta de su casa en Jiutepec, Morelos.
Herrera Avilés fue representante legal de 13 comunidades que lanzaron, en 2007, una denuncia para salvar manantiales amenazados por la urbanización.