Inicialmente, el impuesto que se buscaba imponer a las remesas era de 5%, luego pasó a 3.5% y ahora se prevé quedar en 1%. Desde que se realizó la propuesta, la presidenta Sheinbaum se pronunció en contra y pidió a los mexicanos en Estados Unidos enviar cartas a los legisladores para que no lo aprobaran, además de que una comitiva de senadores viajó al país del norte para explicar las afectaciones que tendría para ambas naciones.
En su conferencia matutina, la presidenta consideró que esas medidas tomadas desde México contribuyeron a que se bajara el impuesto.
“La minuta del Senado de los Estados Unidos, en el caso de las remesas, hay, yo diría, logros muy importantes y ese logro es de nuestros paisanos y paisanas principalmente por el envío de cartas a sus senadores, sobre todo aquellos que tienen la doble nacionalidad, que fue algo que se impulsó y llegaron muchísimas cartas de las y los mexicanos... y senadores que fueron a visitar a senadores de Estados Unidos para pedir pues que no hubiera impuesto a las remesas”, comentó.
Sheinbaum explicó que el 99% de las transferencias son electrónicas, por lo que esos recursos estarían exentos del pago del 1% de comisión
“Entonces es un logro de las paisanas y los paisanos y les enviamos un cariñoso abrazo, saludo y reconocimiento”, agregó.