La presidenta Claudia Sheinbaum enfrenta su primer desafío político-partidista: el conflicto entre los coordinadores morenistas en el Senado y Cámara de Diputados, Adán Augusto López y Ricardo Monreal, respectivamente quienes la semana pasada no sólo evidenciaron diferencias, sino que exhibieron presuntos malos manejos en el Poder Legislativo.
Al asumir la Presidencia de México, Sheinbaum puso pausa a su vida partidista, pues su responsabilidad, dijo, era gobernar para todos los mexicanos. Sin embargo, ante la ausencia del expresidente Andrés Manuel López Obrador, la máxima figura dentro del morenismo es la mandataria.