Esta semana, el pleno de la Suprema Corte no logró los votos necesarios para invalidar parte de la Reforma Judicial aprobada en septiembre por el oficialismo, allanando el último escollo que pesaba sobre la polémica enmienda constitucional, que ha asustado a los mercados y espantado a los inversionistas.
La Corte necesitaba al menos ocho votos a favor del proyecto de sentencia, pero solo contó con siete de los 11 ministros por lo que no pudo suprimir la elección de jueces y magistrados por voto popular, uno de los puntos medulares de la reforma constitucional promovida por el expresidente Andrés Manuel López Obrador.
La sentencia también pretendía invalidar la figura de jueces sin rostro, la remoción masiva de jueces y magistrados y la inacatabilidad de sentencias del Tribunal de Disciplina, un nuevo ente creado con la reforma.
La discusión en el máximo organismo jurisdiccional del país amenazaba con desatar un choque de poderes, luego de que el Congreso, dominado por el oficialismo, aprobó días atrás una reforma constitucional para asegurar que las enmiendas a la Carta Magna no puedan ser impugnadas. Además, solicitó a la Corte el sobreseimiento del proyecto de sentencia.
La mandataria mexicana celebró la decisión de la Suprema Corte, y señaló que ya tenía un plan en caso de que sí tumbaran la Reforma Judicial.
-Con información de la agencia Reuters.