Ante la decisión de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN) de momentáneamente permitir que funcionarios de dos organismos autónomos, la Comisión Federal de Competencia Económica (Cofece) y del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi), puedan percibir salarios superiores a los 111,990 pesos que gana el presidente, Andrés Manuel López Obrador manifestó su molestia e incluso amagó con enviar otra iniciativa de reforma para fijar un tope salarial a los altos servidores públicos.
La Primera Sala de la SCJN otorgó una suspensión a la Cofece para impedir que sus trabajadores deban apegarse a la Ley Federal de Remuneraciones de los Servidores Públicos, según la cual ningún funcionario puede ganar más que el jefe del Poder Ejecutivo federal. Además, los ministros confirmaron una suspensión en el mismo sentido para funcionarios del Inegi.