El gobierno federal declaró que el país entró en una emergencia sanitaria por el brote del coronavirus COVID-19 y, junto con ello, anunció este lunes un endurecimiento de las medidas de la Jornada Nacional de Sana Distancia, con el objetivo de combatir el "ascenso rápido" en la cantidad de casos.
El decreto presidencial con la declaratoria de emergencia sanitaria fue leído por el canciller Marcelo Ebrard, momentos después de que el subsecretario Salud Hugo López-Gatell diera a conocer los ajustes a la Jornada Nacional de Sana Distancia. El primero de esos cambios implica que la suspensión de actividades no esenciales en los sectores público, privado y social sea del 30 de marzo al 30 de abril. Originalmente, se preveía que terminara el 19 de abril.
Esto se informó durante la rueda de prensa diaria de la Secretaría de Salud, en la que también se reportó que el saldo del COVID-19 llegó a 1,094 casos positivos, 2,752 casos sospechosos, 5,635 posibles casos descartados y 28 fallecimientos.