El 1 de julio estará en juego el futuro de toda una generación: Anaya
En un bastión panista y acompañado por los excandidatos presidenciales Diego Fernández de Cevallos y Josefina Vázquez Mota, Ricardo Anaya cerró campaña este miércoles con un llamado al "voto útil" y a no creer en las encuestas que lo ubican en el tercer lugar de las preferencias.
Por la tarde, desde la Velaria de la Feria de León, Guanajuato, el candidato de la coalición Por México al Frente (PAN-PRD-MC) aseguró que tales mediciones son "patrocinadas" por el gobierno de Enrique Peña Nieto, a quien a lo largo de la contienda ha acusado de buscar intervenir en los comicios para favorecer al priista José Antonio Meade.
"(En mi proyecto) cabemos todas y todos los que queremos lo mejor para México. Hago un llamado expreso al voto útil, hagámoslo todos, hagámoslo juntos", pidió Anaya, al reconocer que las próximas horas son cruciales previo a la jornada electoral del 1 de julio.
"Este domingo estará en juego, literalmente, el futuro de nuestro país. Este domingo estará en juego el futuro de toda una generación y yo quiero, hoy, hacer un llamado a todas y a todos los mexicanos de buena voluntad. Les quiero pedir que no se dejen engañar por las encuestas falsas que están patrocinadas desde el gobierno. Nuestra coalición, y esto debe quedar claro, es la única que le puede ganar a (Andrés Manuel) López Obrador", dijo Anaya.
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En esa línea, pidió a sus simpatizantes tocar puerta por puerta en los tres días previos a las votaciones, para invitar a electores a votar a su favor.
"Guanajuato, quienes estén dispuestas y dispuestos a darlo todo en estas horas cruciales, quienes amen a México, quienes amen a Guanajuato, vayamos juntos", insistió.
Durante el mitin, el panista también recibió la promesa del aspirante frentista a gobernar el estado, Diego Sinhué Rodríguez Vallejo, de obtener 1.4 millones de votos el 1 de julio, 200,000 más de los que consiguió Felipe Calderón en esa entidad en la elección de 2006.
"Aquí estamos de pie"
En su cierre de campaña, Anaya tampoco dejó pasar el momento de reiterar el mensaje que en los últimos días ha enviado al presidente Peña Nieto: enviarlo a la cárcel si gana la presidencia y el priista resulta responsable en casos de corrupción.
Igualmente, insistió en que los señalamientos que lo vinculan con una supuesta operación de lavado de dinero en la compraventa de una nave industrial obedecen a una "guerra sucia" en su contra por parte del gobierno federal.
"Me atacaron porque me atreví a decir que, cuando yo sea presidente de México, habrá una fiscalía autónoma que investigará todos los actos de corrupción de este sexenio, la participación de Enrique Peña Nieto", dijo, y aseguró que, pese a lo que considera una embestida ilegal para frenarlo, sigue en la contienda presidencial.
"Aquí estamos de pie", sostuvo el exdirigente del PAN.
Al encuentro, la culminación de una carrera de 90 días en la que Anaya buscó conquistar a los electores, también acudieron el gobernador de Guanajuato, Miguel Márquez Márquez, y dos nietos del fundador del PAN, Manuel Gómez Morín.