"El NAIM representa la parte más oscura de este sexenio": Tatiana Clouthier
Desde que arrancó la campaña presidencial de 2018, la vida de Tatiana Clouthier se divide entre Nuevo León, la Ciudad de México y algunos de los lugares donde Andrés Manuel López Obrador tiene actividades, con jornadas maratónicas que incluyen mítines, reuniones y entrevistas.
En la capital, un edificio en Polanco alberga su oficina, que a veces sirve como 'cuarto de guerra' para planear el paso siguiente en la contienda, y otras, como sala de juntas para ella y su equipo. Mientras toma notas en un cuaderno tipo Moleskine, su celular no deja de sonar.
Dentro de este trajín, la jefa de campaña del candidato de Morena no solo se muestra convencida de las capacidades de quien está en su tercera carrera por la presidencia, sino también de que el círculo de López Obrador debe estar preparado para defender su proyecto, incluso si plantea puntos polémicos como revisar la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de México (NAIM).
A lo largo de las últimas semanas, el tema ha atraído la atención pública y causado tensiones entre López Obrador y los líderes del sector privado , quienes exigen certeza sobre la continuidad de esta millonaria obra.
—¿Esta situación no afecta la campaña? —se le pregunta a Clouthier.
—Pudiera ser (...) Tenemos un proyecto frente a nosotros con un grado de corrupción impresionante, con un montón de preguntas sin resolver y con un montón de dudas que cada día la lista crece (...) Cada vez que se mueve un soplo del aeropuerto, resulta un vínculo no correcto de lo que está ahí, oscuro, y que representa la parte más oscura de este sexenio de la corrupción que reina este país con Enrique Peña Nieto y sus aliados.
Entre 2006 y 2018
Clouthier, de 53 años, decidió apoyar a López Obrador en 2005, un año antes de las primeras presidenciales en las que compitió, mismas que perdió por un margen cerrado a pesar de que llegó al arranque de campaña adelante de sus rivales.
En aquella ocasión, López Obrador compitió contra otros cuatro candidatos —Felipe Calderón, Roberto Madrazo, Roberto Campa y Patricia Mercado—, de los cuales Calderón, del PAN, logró hacerse con el triunfo por menos de un punto porcentual. Hoy, dice la jefa de campaña, los tres rivales del morenista —Ricardo Anaya, José Antonio Meade y Margarita Zavala— representan el mismo plan de gobierno y un regreso al pasado.
Por ello, cuando se le pregunta qué podría fallar en esta contienda, dice ser positiva y llama a pensar en el porvenir.
"Independientemente de que pase lo que pase, por qué voltear a ver atrás. Hablan de que Andrés voltea para atrás, que habla del pasado. Yo los invito a ver al futuro, y ni siquiera el futuro: el presente", señala.
El último out
Pese al optimismo, Clouthier sabe que la contienda no termina "hasta que caiga el último out", una referencia al beisbol, el deporte favorito del propio López Obrador.
En los primeros días de campaña, el morenista decidió arrancar sus actividades proselitistas en el norte, una región donde no tiene su mayor presencia pero donde, según su jefa de campaña, ha habido apertura a su mensaje y propuestas.
"Estos son los dos caminos que tiene México: el camino de la transformación con esperanza y futuro (...) y el México en donde seguirá esta parte, estos tres que están frente a nosotros, donde seguiremos viviendo asustados, con un futuro incierto, de miedo, con balas, con muertos, con cuerpos, con sangre", dice la coordinadora.
La decisión de "invertir" en AMLO
La intensidad del arranque de campaña se refleja también en el timeline de la propia Clouthier, donde da cuenta de los lugares visitados, las reuniones realizadas y las entrevistas concedidas. Ahí, en Twitter, ella interactúa con miles de seguidores de López Obrador y vive el reto de convencer "a quienes pagan por desprestigiarlo".
—¿Y quiénes son? —se le pregunta.
—Pronto lo sabrán —responde sin dar más pistas.
Hija del excandidato presidencial Manuel Clouthier, Maquío, la jefa de campaña de López Obrador dice que llegó a esa posición dispuesta a invertir en él todo lo ahorrado a lo largo de trayectoria.
"Es la ultima vez que digo que voy a jugar al frente de una elección, y cuando digo al frente es que le voy a poner mi 'fua'. En otra elección habré simplemente de cuidar una casilla, habré de ir a votar", dice.
Decidí invertir eso que he ahorrado (en política y ciudadanía) en Andrés Manuel".
La decisión de ir con López Obrador como su coordinadora no fue fácil, pues también implicó dejar la organización civil a la que pertenecía y elegir un momento en el que no afectara las aspiraciones de sus hermanos, Rebeca y Manuel , quienes buscaban candidaturas por el PAN y la vía independiente.
"Un día antes, a Rebeca le dije: 'Voy a dirigir la campaña de Andrés, mañana es público, así que te pido prudencia para que te prepares por si te hablan y te preguntan, que no te agarren de sorpresa'", recuerda la también exdiputada federal.
Sin embargo, el anuncio sorprendió incluso en Morena, por lo que ella considera que su designación fue un secreto que López Obrador trajo guardado hasta ese 15 de enero, cuando tras pronunciar un breve discurso le cedió el micrófono para que ella diera un mensaje.
"Cuando regreso de dar el discurso, se para y me dice: 'Hablaste como la candidata y yo como tu coordinador'. Fue cuando bajamos de ahí que de repente ¡boom!, los teléfonos empezaron a sonar y entonces me di cuenta de a qué me había comprometido, quizá no lo vi antes", dice la jefa de campaña, a quien aún esperan tres meses antes de llegar al día de la elección... y poder ver si la inversión que hizo de todo su capital político le brinda resultados.