La sorpresa de 50,000 dólares
El representante de los aduaneros, comenta que, a pesar de las amenazas constantes del presidente Trump de imponer aranceles, la medida sí tomó por sorpresa a muchos.“Yo creo que muchas maquiladoras pensaban que se iba a detener la medida y ha tomado desprevenidos a varios. No hubo preparación”.
Y esta falta de anticipación y la sorpresa se ejemplifica con una caso que conoció García Martínez de boca de un agente aduanal de Estados Unidos, a quien le tocó que por el 25% aranceles ya alguien debía pagar 50,000 dólares.
“¿Te imaginas ese monto? Yo no puedo financiar ese costo, a partir de ya se le deberá pedir al cliente recursos para fondear porque, tres o cuatro casos como ese, pues ¡mata a cualquiera, no se aguanta ese ritmo”, expresa. “La gente está preguntando ya: ¿Cómo le hago?”.
Esta percepción la comparte Leticia Hervert, expresidenta del Instituto Mexicano de Contadores Públicos (IMCP), quien señala que con estas cantidades se vuelve imposible para los agentes aduanales mexicanos asumir esas cargas financieras para pagar los aranceles.
“¿Qué producto va a soportar un incremento del 25% cuando los márgenes de utilidad cada vez son menores”, dice con preocupación.
¿Qué significa frenar la transportación de los productos de una maquila al otro lado de la frontera en economías tan integradas como lo están Texas y Tamaulipas. Interrumpir toda la cadena de producción de un vehículo, tener parados a los trabajadores que lo están esperando para seguir. Es mucho dinero.
Tan solo en febrero pasado, las operaciones en las que estuvieron involucrados los agentes aduanales en esta frontera fueron 2,000 al día, de las cuáles 1,375 fueron exportaciones, en su mayoría de perecederos y componentes, mientras que 625 fueron importaciones a México, un 70% de insumos para las maquilas instaladas en la ciudad.
Por la tarde llegaron algunas noticias que dieron una bocada de aire fresco: la exención temporal de aranceles a los vehículos importados bajo el Tratado firmado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
Pero este agente aduanero con gran experiencia sabe que no se pueden confiar pues “la información puede cambiar cada minuto”.