Tan solo en febrero y enero de 2025 se han identificado 460 casos sospechosos, de los cuales se han confirmado 120 en 21 estados del país.
El repunte de tos ferina ocurre también en otros países de América como Brasil, que sumó 240 casos el año pasado. Perú es otra de las naciones con más tos ferina en 2024, cuando reportó 24 contagios, mientras que Colombia confirmó 64.
Al final del año pasado, Estados Unidos notificó 35,435 casos de tos ferina y 10 defunciones.
Un aumento así no se registraba desde 2012 en la región. Ese año se había reportado la última cantidad considerable de casos (72,328) y, desde entonces, estos fueron a la baja hasta 2022.
Por el repunte, asociado con la caída de las coberturas de vacunación en varios países, la Organización Panamericana de la Salud (OPS) emitió una alerta epidemiológica desde julio de 2024. Ahora, México ha recomendado fortalecer la vigilancia de la tos ferina.
Sin embargo, las autoridades de salud explican que, desde el año 2016 hasta 2019, en México se registraron anualmente 900 casos de tos ferina en promedio. Fue a partir de 2020, con la pandemia de covid-19, que la vigilancia epidemiológica de esta enfermedad disminuyó y se registró un decremento en la notificación de casos probables y confirmados.
“Esta baja en la notificación se sostuvo hasta el año 2023, en el que se registraron 188 casos confirmados, con una incidencia de 0.14 casos por 100,000 habitantes, seguido de 463 casos confirmados en el año 2024, con una incidencia de 0.34 casos”, apunta la Secretaría de Salud.
Los 120 contagios confirmados en lo que va de 2025 corresponden a una incidencia de 0.08 casos por 100,000 habitantes.