La Unión de Comerciantes de Culiacán estima que alrededor de 300 establecimientos cerrarán de manera definitiva esta temporada, además de registrar 60 por ciento menos ventas que el año pasado; los más afectados son los pequeños comercios.
Matilde trabaja como estilista en la capital de Sinaloa. Ella cuenta que el “toque de queda” comenzó a partir de que avionetas lanzaron volantes en los que se pedía a la población no permanecer en las calles de noche porque ellos “iban a trabajar”. El mismo mensaje se difundió a través de redes sociales.
“Es una guerra entre dos bandos; ellos mismos han anunciado que de noche van trabajar y que por favor trates de estar en tu casa antes de las nueve de la noche, porque ellos no se hacen responsables de lo que pase afuera, o de si te toca a ti ser algo colateral andando en la calle”, cuenta.
En entrevista, explica que esta violencia desatada hace más de tres meses también ha afectado su negocio, una estética. Aunque las mujeres en Culiacán son “muy arregladas”, dice, por los enfrentamientos han decidido acudir antes de que obscurezca, o bien, optan por no ir; otras, de plano, han preferido dejar el estado.
"Este diciembre está vibrando muy bajo, no paran las balaceras. Son las 6:30 (pm) y todo mundo empieza a correr a sus casas. Todo mundo tenemos un toque de queda. Entre las 8:30 o 9:00 de la noche escuchas balazos, se oyen los cuernos (de chivo), a veces duran un ratito", relata.
Explica que las personas prefieren no salir de noche porque hay retenes en el estado donde delincuentes bajan a la gente de sus coches, se los quitan, les revisan el teléfono y hasta los retienen para preguntarles "de qué bando son”.
Esta es una Navidad muy triste, una Navidad que no va a ser como otros años, donde salías a la cena, ahora cada quien va a hacer su cena.
Matilde, estilista de Culiacán.
Ante esta ola de violencia, el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, ha acudido varias veces al estado para implementar una nueva estrategia de seguridad en conjunto con las autoridades locales; sin embargo, la entidad sigue figurando entre los estados con mayores índices de homicidio.
Según el reporte diario de homicidios de la Secretaría de Seguridad federal, tan solo en este mes -hasta el día 22- se registraron 121 asesinatos en la entidad, cifra que representa el 8% del total en el país.
Jorge es un profesor de pilates y, ante la violencia generada en Sinaloa, tuvo que cancelar sus clases de las 19:00 horas en adelante, lo que le ha provocado pérdidas de hasta 50% en sus ingresos.
“Desde las siete la gente empieza a meterse en sus casas. Ya baja mucho el movimiento en la ciudad. Me afecta (la violencia en Sinaloa) porque mi negocio tiene que ver con que las personas vengan a mi escuela a tomar clases. Entonces, ahora tuvimos que recortar los horarios por la misma situación. No tengo alumnado en la tarde”, dice.
Recuerda que desde septiembre comenzó a disminuir la asistencia de sus alumnos, pues fue ese mes cuando comenzó el incremento de la violencia en la entidad. Ahora, dice, a esto se le conoce como “narcopandemia”, pues al igual que la pandemia por Covid-19, esta también ha provocado el cierre de negocios y el aislamiento en los domicilios.
“Había entre 27 a 30 alumnos entre todos los grupos que tengo y ahorita tengo como 10, que están fijos. A veces en los grupos de la tarde sólo hay 2 alumnos, está bastante solo”, dice, por lo que agrega que ha contemplado cerrar el lugar.
Para solventar sus gastos, Jorge comenzó a vender macetas y artesanías, y ha incrementado su tiempo como chofer de Uber, pero sólo por la mañana, pues asegura: “las deudas no se detienen”.
Desde las siete la gente empieza a meterse en sus casas, (...) rn la noche ya no se puede andar
Jorge, profesor de pilates.
Según datos de la Fiscalía de Sinaloa, en septiembre sumaron 144 asesinatos, en octubre 188 y noviembre cerró con 175, un total de 507. El histórico crecimiento de la violencia es tal que tan solo en estos tres meses ya se superó la cifra de asesinatos de todo 2023, año en el que se registraron 492 homicidios dolosos.
Esta violencia deriva de la detención del narcotraficante Ismael “El Mayo” Zambada el pasado 25 de julio en Estados Unidos, por una traición de Joaquín Guzmán López, hijo del capo Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Rosa tiene una empresa de diseño en Sinaloa. Ante la crisis de violencia que se vive en el estado sus ventas han bajado, ya que la mayoría de sus clientes se dedican a decorar eventos, como fiestas de 15 años, bodas o cumpleaños.
“Al surgir el tema de la violencia, la gente tiene miedo de hacer fiestas o estar fuera de sus casas después de las 8 de la noche”, lamenta.
Explica que ahora estas festividades se han pospuesto o cancelado, por lo que esto le ha afectado, ya que los organizadores no les compra nada. Recuerda que en septiembre y octubre sus ventas bajaron hasta 60% comparado con meses anteriores; mientras en diciembre “ya subió un poco”.
Comenta que debido a la disminución en las ventas ha tenido que utilizar un fondo de ahorro con el que cuenta para pagar a los salarios de las 13 personas que laboran con ella, pues si no lo hacía, habría aplicado un recorte de personal.
"Si no hubiera contado con ese fondo de ahorros, creo que hubiera tenido que aplicar un recorte de personal. He buscado mucho la manera de mantenerme. Estoy buscando diversas alternativas a través de redes sociales. Si es posible mandar los productos a través de DiDi para facilitar a los clientes el que no tengan que desplazarse de sus casas hacia el punto de venta”, dice.
Rosa advierte que los últimos meses son los únicos que ha tenido pérdidas, pues antes registró crecimientos mensuales de hasta 20%.
Mientras pueda mantener el negocio con el fondo de ahorro, lo voy a mantener, porque tengo la esperanza que esto va a cambiar y que es momentáneo.
Rosa, dueña de una empresa de diseño.
La Coparmex Sinaloa estima que en estos tres meses de “narcopademia” las pérdidas del sector comercio, de servicios y de turismo, ascienden a por lo menos 18,000 millones de pesos.
En entrevista con Expansión Política, Martha Reyes, presidenta de este organismo patronal en el estado, comentó que, si bien en diciembre con el pago de los aguinaldos los culichis salieron a comprar los regalos, aun así registrarán pérdidas debido a que los comercios han tenido bajas ventas.
“Estos días, después de que se empezaron a pagar los aguinaldos, la gente salió a comprar el detalle. Aunque el gobierno dio algunos apoyos de hasta 20 mil pesos a las micro, pequeñas y algunas medianas empresas, pues son insuficientes. Fue una aspirina para poder pagar el recibo de la luz o la renta del local. Un apoyo del seguro social de diferir la cuota del seguro social a 30 días", comenta.
Reyes considera que durante noviembre y diciembre ha habido un repunte en las ventas por la temporada, pero no como otros años; además, las empresas siguen trabajando sólo en horario diurno, con una apertura de 60% aproximadamente, porque las “noches siguen sin recuperarse”.
“Entre las 5 y 6:30 (de la tarde) el 50% de la gente ya está en sus casas y para las 7:30, 80% ya está en su casas. Eso hace que la gente no alcance a comprar. Las tiendas ahorita cierran a las 6:00 de la tarde. No ha habido un repunte, pero no estamos tan mal como nos fue en octubre”, declara.
“Los empresarios estamos a la expectativa de qué acciones va a tomar el gobierno con respecto a la seguridad que nos permita seguir abiertos en enero sin poner en riesgo como lo que está pasando ahorita , que ha habido bastantes incendios”, agrega.