Estos últimos alumnos son los que fueron evaluados en la reciente edición de la prueba PISA, que impulsa la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE).
Los resultados dieron cuenta del impacto del confinamiento en sus habilidades: dos de cada tres estudiantes de 15 años no lograron realizar operaciones matemáticas simples; uno de cada dos no comprendió una lectura, y la mitad se ubicó en el nivel más bajo en ciencias.
Pero los alumnos que participarán en las próximas evaluaciones vivieron el confinamiento sin terminar la primaria y esto, considera la organización, puede repercutir con mayor gravedad en su desempeño escolar.
Quienes participen en prueba PISA 2025 son los estaban en cuarto grado de primaria cuando la pandemia irrumpió su normalidad, mientras que aquellos que serán evaluados en 2028, porque el test se aplica cada tres años, iban en primero de primaria en 2020, cuando el país cerró las escuelas por 200 días, el periodo más prolongado de los países miembro de la OCDE.
“Significa que tenemos 15 generaciones con este dañino paréntesis en sus trayectorias de aprendizaje en los niveles inicial y básico, es decir, desde el nacimiento hasta tercero de secundaria”, subraya Antonio Villalpando, investigador de Mexicanos Primero.