La propuesta plantea reformas a la Ley Minera, Ley de Aguas Nacionales, Ley General de Equilibrio Ecológico y a la Ley General para la Prevención y Gestión Integral de los Residuos en Materia de Concesiones y para Minería y Agua.
Minería y uso de agua
Otro de los principales cambios propuestos es la implementación de la figura de “concesión de agua para uso específico en minería”. Este permiso quedará sujeto a la disponibilidad de agua, tendrá una duración de 5 años, con posibilidad de prórrogas por igual periodo de tiempo.
Actualmente, según la exposición de motivos de la iniciativa, 66% de las concesiones de agua se ubican en acuíferos sin disponibilidad y 18.96% en acuíferos sobreexplotados.
Las concesiones mineras se deben cancelar, entre otras cosas, si no cuentan con la concesión de agua para minería vigente; por riesgo inminente de desequilibrio ecológico, o en casos de contaminación. Lo anterior porque el documento expone que en 2019 la minería ocupó el primer lugar entre las causas que generan sitios potencialmente contaminados.
Además, queda prohibida la explotación y exploración en cauces o vasos de aguas nacionales y sus zonas federales, en los zócalos submarinos de islas, cayos y arrecifes y en la zona federal marítimo terrestre.
También se plantea que los concesionarios deberán instalar dispositivos de medición del agua en tiempo real en todas las tomas utilizadas para minería y presentar un informe anual sobre las descargas.