Si el 3 de octubre próximo, en que ofreció regresar a la zona, siguen los amparos vigentes, no se realizarán los trabajos pues no se puede confiar en un juicio justo, advirtió. En visita a Lerdo, Durango, el jefe del Ejecutivo emplazó a retirar los recursos legales contra sus obras.
“Se los digo: no voy a ser rehén de nadie. El presidente de México no puede ser rehén de personas o de grupos por poderosos que sean por influyentes que sean, por combativos que sean.
“Pónganse en mi lugar, estamos inaugurando esta obra, no quiero heredar obras inconclusas”, dijo a los gobernadores de Durango, José Rosas Aispuro; de Coahuila, Miguel Ángel Riquelme, y a los alcaldes de nueve ayuntamientos que integran la Comarca, además de empresarios como Eduardo Tricio, presidente de Grupo Lala.
Hace un año el gobierno federal anunció ese proyecto, con el que se busca dotar de agua potable a nueve municipios de ambos estados que integran la Comarca Lagunera, que hoy consume agua contaminada con arsénico. Hoy los gobernadores se manifestaron a favor de las obras.
El plan consiste en transportar el líquido vía acueductos del Río Nazas a la zona urbana, lo que de acuerdo a ambientalistas dañará el Parque Ecológico Cañón de Fernández y no atenderá el problema de abasto de líquido. El pasado 8 de agosto, la Asociación ProDefensa del Nazas obtuvo de un juez federal la suspensión definitiva, por lo que las obras deberán detenerse.
Por eso las obras se cancelarán si persisten amparos, dijo López Obrador.
“Si ya empezaron los amparos, pues entonces no vamos a poder terminar la obra. ¿Ustedes creen que voy a poder confiar en el Poder Judicial? no me estoy chupando el dedo, desgraciadamente el Poder Judicial está podrido", aseguró.