"Yo soy trabajadora de laboratorio, acabo de salir de la prueba de COVID-19 y les pedí unas botas quirúrgicas. Me dieron unas bolsas de plástico. Compré mi overol, mis uniformes, no es justo que nos estemos arriesgando, con unas bolsas de plástico, para poder entrar a la toma", dijo María Esther T., durante la protesta afuera de la Unidad de Medicina Familiar (UMF) 120, en la avenida Ignacio Zaragoza, en la alcaldía Iztapalapa.
Con cartulinas afuera del hospital, ella y sus compañeros exigieron material médico y que la atención a los enfermos sea la adecuada.
Aseguraron que la unidad no está hecha para atender a pacientes con coronavirus y que, el martes, cadáveres fueron "amontonados" en un cuarto, sin las medidas de protección necesarias.
"Solo me dijeron: 'No hay material'. Estamos cansados, el laboratorio ya ha tenido varias muertes. Ha fallecido un compañero y varios se han ido positivos", dijo María Esther.